Luego de dos semanas de intensos peritajes, el Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar) determinó que la muerte del cabo Eugenio Nain, el 30 de octubre en Padre Las Casas (La Araucanía), fue producto del impacto de una bala calibre 5.56. Se trata de un proyectil de fusil de guerra.
Así lo concluyeron las pruebas que hizo Carabinero, las que fueron entregadas ayer al fiscal del caso, Carlos Bustos, luego de reconstruir prácticamente toda la bala, dado que esta había quedado destruida.
Por lo mismo, se tomaron análisis de los restos del proyectil, el cual se alojó por la zona costal del carabinero fallecido. Con esta información, la fiscalía podrá ingresar los datos de la bala en una plataforma de registro -que funciona como un banco de información- y así determinar si el arma desde donde salió el proyectil fue utilizada en otros atentados en la zona.
Otro peritaje en curso es la trayectoria de la bala. Según explicaron fuentes del caso, Labocar ya estableció las distancias y desde donde habrían disparado los atacantes.
De acuerdo a los resultados preliminares de los equipos policiales, los encapuchados abrieron fuego desde una zona aledaña a la carretera, a uno 100 metros desde donde estaban los carabineros.
El caso es prioritario, tanto para Carabineros como para el Ministerio Público. Por lo mismo, la policía tiene en La Araucanía a un equipo de más de 20 efectivos abocados exclusivamente en la recolección y análisis de antecedentes para dar con el paradero de los sospechosos, los que se cree serían parte de un reconocido grupo radicalizado que opera en la zona.
En paralelo, para el Ministerio Público la investigación también tiene una relevancia especial.
Por lo mismo, la Fiscalía Regional de La Araucanía le entregó al fiscal de Alta Complejidad, Carlos Bustos, la exclusividad para investigar al caso. Esto significa que sus labores investigativas ahora estarán radicadas exclusivamente para avanzar en la causa del cabo Nain.
El perfil del fiscal
El fiscal Bustos asumió la causa desde el primer día, pero al ser fiscal adjunto de la unidad de Alta Complejidad, también tenía que pesquisar otros casos. No obstante, debido a la relevancia de esta causa, donde estarían involucrados -sospechan fuentes del caso- grupos violentos y con alto poder de fuego en la zona, sumado al factor de la alta carga laboral del Ministerio Público, se le entregó la dedicación exclusiva.
El persecutor también indagó el atentado al fundo de Lumaco “El buen retiro”, ocurrido el 30 de mayo de este año, investigación donde fue formalizado Emilio Berkhoff, supuesto exmiembro de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM). Esta causa aún continúa en etapa investigativa y Berkhoff está en prisión preventiva.
Bustos egresó de Derecho en el año 2009, desde la Universidad Autónoma, siendo el mejor alumno de su promoción. En 2012 entró a la Fiscalía Regional de La Araucanía, primero como abogado asistente en la Fiscalía de Nueva Imperial; en 2016 se convirtió en fiscal adjunto en Angol y desde marzo de ese año hasta ahora, es persecutor en Alta Complejidad.
Sin embargo, en el Ministerio Público evitan hablar de “nombres propios” a la hora de indagar casos de violencia rural y así evitar los personalismos.
Para el fiscalía de la zona, son los equipos los que deben destacar y no personalizar las investigaciones, por lo mismo, enfatizan que en el caso de Bustos, él es parte de un equipo de fiscales de Alta Complejidad, donde se busca especializar la labor investigativa en violencia rural.
Encapuchados en la ruta
En tanto, ayer en la tarde se intensificaron los operativas en torno a la detención de un joven que habría participado de los enfrentamientos con Carabineros el sábado, durante la marcha por la conmemoración del homicidio de Camilo Catrillanca.
La PDI inició una investigación que identificó al sospechoso en Talcahuano, tras ser lesionado y haber sido trasladado hasta un hospital.
Queman colegio en Lonquimay
Un incendio de carácter intencional redujo a escombros parte de las instalaciones de la escuela básica municipal de Cruzaco en la comuna de Lonquimay, en horas de la tarde de ayer.
A la emergencia concurrieron unidades de Bomberos de la comuna con apoyo de voluntarios de Curacautín, quienes junto a vecinos evitaron que el fuego se propagara al resto de la instalación de material ligero.
El fiscal de Curacautín, Iván Isla, ordenó que personal especializado de la policía realice las primeras diligencias para esclarecer el hecho.