Se acabó el misterio: hoy fue confirmado el nombre de la nueva rectora (interina) del Instituto Nacional. Lilí Orell será la segunda mujer en la historia que encabezará el emblemático establecimiento, que vive en la actualidad una profunda crisis.
Entre la experiencia que muestra la docente se cuenta haber ejercido como seremi metropolitana de Educación durante el primer gobierno de Sebastián Piñera, entre mayo de 2010 y febrero de 2012.Luego, hasta 2013 se desempeñó como jefa de gabinete de la subsecretaria de Desarrollo Social y después asumió como asesora de gabinete en el entonces Servicio Nacional de la Mujer (Sernam).
Orell es profesora de Física y Ciencias Naturales, magíster en Gestión y Administración Educacional y máster en Dirección y Gestión de Centros Educativos en el Nuevo Entorno Digital. Sucederá a Fernando Soto, cuyo período de cinco años concluye este viernes.
La directora estará al mando del establecimiento hasta el 28 de febrero de 2020, cuando asuma el rector definitivo, quien será elegido a través de un concurso por Alta Dirección Pública. Dicho concurso ya cerró y hubo casi 150 postulantes, informó Yoris Rojas, directora de Educación de la comuna de Santiago.
A la nueva autoridad interina se sumará un equipo asesor de cuatro mujeres, conformado por Patricia Nilo, María Claudia Galdámez, Carmen Gloria Sandoval y María Eliana Lagos.
La primera mujer que estuvo al frente del Instituto fue Olga Vivanco, entre 1986 y 1990.
"Plenas atribuciones"
El nombramiento de Orell fue informado oficialmente hoy por el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri. "Ella asume con plenas atribuciones y trabajará con toda la comunidad escolar para que estén involucrados desde el principio en esta nueva etapa", señaló el jefe comunal. "Vamos a ir dejando atrás los días amargos y nos vamos a enfocar en un nuevo Instituto", agregó.
Durante una reunión con dirigentes de los centros de apoderados, realizada hoy a partir de las 19 horas, Orell reconoció que para ella es "un honor tener esta responsabilidad. Es un gran desafío.
Yo no vengo a resolver un problema. Vengo a sumarme junto con este grupo de mujeres que queremos que la educación pública retome el lugar que le corresponde".
"El Instituto Nacional es el emblema en Chile de la educación pública y no podemos dejar que pierda su liderazgo", añadió. "Les pido un voto de confianza por el Instituto y este equipo".
"Tenemos que trabajar por un bien común, retomar la senda de la historia y manejar lo que significa el futuro del Instituto, en que el proceso de modernización es clave", enfatizó.