Arturo Erasmo Vidal Pardo (37), fuera del fútbol, tiene diversas facetas. Una son los negocios, pero que estos vayan de la mano de la entretención.

El King invirtió hace 10 años en un centro deportivo en Chicureo, cuyas instalaciones contaban con una piscina semi olímpica temperada, canchas de futbolito y una cartera activa de más de 1.000 socios.

También es conocido por su afición a las carreras de caballos, actividad en la que tuvo a una megaestrella llamada Il Campione, con el que ganó importantes pruebas como El Ensayo y El Derby y que ahora cumple tareas de semental en Argentina. Además, el caballo le dio el nombre al haras que tiene en San Clemente. “Al principio era una idea, después fue un sueño y hoy es realidad!!! Disfrutando de mi casa que con tanto sacrificio, esfuerzo y trabajo construimos”, escribió en sus redes sociales en julio de 2021.

Il Campione en la pista del Valparaíso Sporting Club.

Hoy su apuesta es vitivinícola: un vino Cabernet Sauvignon (CS), cosecha 2023 y que estaría a la venta a fines de noviembre.

En esta nueva incursión su asesor es el ingeniero agrónomo y enólogo Cristián Azócar, quien tiene más de 20 años ligado a la industria y encabeza el equipo que trabaja en la viña Lagar de Codegua.

Azócar cuenta a La Tercera que hace muchos años atrás tuvo la suerte de hacerle un vino al club O’Higgins de Rancagua, que tiene muchos amigos en el fútbol y que también hizo un mosto para la despedida de Pedro Pablo Hernández. En su círculo también está el entrenador Marco Antonio Figueroa y el kinesiólogo de Colo Colo, Wilson Ferrada. Y fue este último quien lo acercó a Vidal.

“El año pasado quisimos hacer algo con Esteban Paredes, pero al final no resultó por temas de tiempo. Pero esta idea siempre quedó dando vueltas y este año Wilson me dijo que Arturo quería hacer algo, de ahí nos juntamos, lo conocí y empezamos a trabajar en el diseño de lo que él quería un poco, de lo que yo también quería un poco mostrarle”, dice el enólogo.

Azócar señala que estuvieron trabajando “callados todo este año y estamos muy contentos con lo que hemos hecho. Se podría decir que es un vino de autor porque en el fondo lo estamos trabajando en una escala bastante pequeña, van a ser 10.000 botellas” en una primera etapa. “Es un Cabernet Sauvignon, pero que viene de varios cuarteles de la viña Lagar de Codegua, que es la viña en el fondo que está apalancando esto” y que se ubica en el valle de Cachapoal.

El agrónomo detalla que es un vino de la cosecha 2023, “básicamente porque Arturo juega con la 23 hoy día en Colo Colo, entonces también es como un guiño a su número emblemático. Y el corcho tiene los dos números, el 23 que es por su número tradicional, y el 8 cuando juega por la selección”.

Y añade: “Al final lo que yo quiero es que este sea un negocio bonito, que lo pasemos bien. Hasta el minuto lo hemos pasado increíble porque hemos degustado cosas buenas. Vamos a hacer el lanzamiento, estamos buscando dónde hacerlo, yo creo que va a ser de aquí a fin de noviembre. Tenemos una etiqueta diseñada, es extraordinaria, a mí me gusta mucho. A Arturo le gustó, la etiqueta es Arturo”.

Luego entrega mayores detalles: “El corcho tiene una A y una V, pero la etiqueta la tenemos guardada bajo siete llaves, absolutamente guardada. La contraetiqueta es igual, maravillosa. (Todo) lo vamos a empezar a mostrar de a poco, pero nada relacionado con ningún equipo”.

¿Por qué Cabernet Sauvignon y cuál será el precio? Azócar responde: “Básicamente yo traté de hacer dos cosas muy lindas para Arturo. Una, el cabernet es el rey en Chile de las exportaciones, el rey de las variedades vitivinícolas en Chile. Entonces, ¿a quién (representa) mejor? Al King. Y en términos de precios, costará alrededor de 25 mil pesos porque nosotros creemos que el vino cuesta lo que tiene que salir, nada más. No es un vino de 2.000, 3.000 pesos la botella, para nada. ¿Por qué la gente está dispuesta hoy día a pagar 50, 60, 70 mil pesos por vino chileno? Porque los vale. Y este vino yo creo personalmente que vale eso”.

Azócar reconoce que trabajar con Arturo Vidal ha sido “súper bonito porque uno conoce otra faceta de alguien tan conocido”. Cuenta que él llegó con muchas ganas de aprender, de conocer lo que es el negocio vitivinícola. “Entonces para mí ha sido una súper buena, una súper bonita experiencia. No pensé, honestamente, que iba a ser tan mediático el tema porque yo no estoy acostumbrado. Yo soy un enólogo que igual tiene un nombre en la industria, he ganado varios premios y tengo vinos muy buenos que han sido seleccionados... Pero nunca pensé el tema mediático y eso a mí personalmente me tiene un poco asustado”, cierra.