Una de las propuestas que han sido enarboladas por parte de los manifestantes que han protagonizado marchas y protestas estas últimas semanas es ir en ayuda de los jóvenes endeudados con el Crédito con Aval del Estado (CAE).
Aunque se trata de una idea generalmente planteada por movimientos estudiantiles y partidos de oposición, esta semana el presidente de Renovación Nacional, Mario Desbordes, sorprendió, al plantear la opción de incluir en la agenda social impulsada por el gobierno la condonación de la deuda a quienes están en el 60% más pobre de la población y, por ende, podrían haber recibido la gratuidad, si hubiese existido antes de 2016. Respecto de los alumnos que hoy mantienen una deuda CAE, pero que no calificaban para la gratuidad, plantea condonarles los intereses y multas y traspasar el saldo del capital de la deuda al nuevo crédito que impulsa el gobierno.
"Hay que solucionar el problema de los deudores de los distintos créditos, no solo el CAE. Hay que lograr financiamiento flexible y que no sea una carga enorme para quien quiere estudiar", dijo el diputado, quien ya conversó sobre un posible "perdonazo" con el ministro del Interior, Gonzalo Blumel.
Desde el Frente Amplio, la diputada frenteamplista Camila Rojas (Comunes) dice que su partido propone que la condonación no sea solo del CAE, sino que se debe extinguir "la deuda de todos los créditos adquiridos para estudiar, eso incluye al Fondo Solidario y el Crédito Corfo. Y a diferencia de lo que propone RN, creemos que debe ser una condonación universal y sin condiciones".
Rojas, quien presidió la comisión investigadora del CAE, cuenta que actualmente están discutiendo, además, un proyecto de ley para que las deudas educacionales no aparezcan en Dicom, "que si bien no soluciona el drama del endeudamiento masivo por estudiar, avanza en la dirección correcta".
Este jueves, en tanto, el presidente del Senado, Jaime Quintana, y su par PPD Felipe Harboe presentaron una propuesta que busca condonar parte de los intereses del CAE, que afectan a más de 870 mil estudiantes. "Entendiendo que se trata de educación, y que buscamos paz social, sería un esfuerzo enorme que creo todo Chile lo agradecería", señaló Harboe.
La iniciativa contempla, además, pedirle al gobierno que, a través de los fondos soberanos de nuestro país, se financie el 50% de la deuda capital de las y los estudiantes endeudados, lo que equivaldría a US$ 2,65 billones de dólares, como forma de descomprimir la difícil situación por la que pasan miles de personas que debieron endeudarse entre los años 2006 y 2018 para poder estudiar.