17 de noviembre: "Los cuatro carabineros que ingresan primero al sector no portaban cámara"
Fue la versión inicial, la que transmitió a La Moneda y la que dejó plasmada el sábado 17 en la mañana, en una entrevista concedida a La Tercera. Durante los primeros tres días tras el incidente que terminó con el asesinato de Camilo Catrillanca, el general director de Carabineros, Hermes Soto, señaló públicamente que ninguno de los efectivos que estaban en la patrulla que disparó al comunero mapuche contaba con los elementos para registrar el operativo.
18 de noviembre: La tarjeta de memoria destruida
La trama empezó en la tarde del sábado 17, cuando Soto pidió en reserva una reunión con el ministro del Interior, Andrés Chadwick, para decirle que la versión inicial no era verdad. En esa ocasión, la información transmitida fue que uno de los carabineros del operativo llevaba una GoPro, y que habría destruido la tarjeta de memoria, por lo que seguía sin existir un registro. Sobre las motivaciones del carabinero Raúl Ávila para eliminar esa tarjeta, Soto señaló en una comparecencia en el Congreso que lo había hecho para eliminar imágenes personales junto a su pareja que tenía en dicha tarjeta.
5 de diciembre: Las dudas sobre la destrucción de la tarjeta
Mientras la investigación de la Fiscalía daba con registros de video de los momentos previos y posteriores del operativo registrados por otras patrullas, y que no dejaban lugar a dudas sobre la existencia de la cámara de Ávila en el operativo, fue el propio abogado del exuniformado, Javier Jara, quien salió a negar la segunda versión de Soto: aseguró a La Tercera PM que su defendido "no manipuló la evidencia", y señaló también que "no me consta que en esa tarjeta hubiera imágenes privadas". Todo esto mientras se acusaba que el testimonio inicial de los efectivos fue coordinado de forma conjunta por generales de la zona y abogados de la institución.
19 de diciembre: El video que captura el momento del disparo
Hermes Soto aseguró que se había enterado por la prensa de los registros. Dos videos capturados con una cámara personal por otro efectivo de la patrulla, Patricio Sepúlveda, contenían el momento exacto en que la patrulla de Carabineros le dispara a Camilo Catrillanca y las reacciones de los efectivos luego de que éste cayera herido. Es decir, el momento que supuestamente no existía en ninguna clase de documento. Eso sumado a la difusión de otros tres videos que muestran en especial el instante en que los carabineros trasladan a Catrillanca sangrando desde el tractor azul dejó a Soto en una posición sumamente compleja, lo que se terminó sellando con su salida de la jefatura institucional.