Desde el Ministerio de Salud informaron que se comenzó a implementar una iniciativa llamada Programa Integral de Reparación Ocular, la cual asegurará atención gratuita para las personas que han resultado con lesiones oculares producto de los hechos de violencia ocurridos en estas últimas semanas. Ésta incluye atención médica, estética y funcional, además de apoyo psicológico.
"El motivo de esta conversación es expresar nuestra enorme preocupación por lo que está ocurriendo en el país. Sólo en el servicio público hemos tenido que atender a más de 1.800 víctimas de la violencia. Y un capítulo muy dramático son las lesiones oculares", dijo el ministro Jaime Mañalich.
Al respecto, el subsecretario Arturo Zúñiga detalló que las atenciones del programa se otorgarán en la Unidad de Trauma Ocular (UTO), del Hospital Salvador, centro de referencia nacional. "Esta unidad brindará atención psicológica, social, rehabilitación, apoyo visual y todas las intervenciones necesarias para optimizar la posibilidad de recuperación", explicó la autoridad.
Según datos de la UTO, difundidos por el Colegio Médico, desde el 19 de octubre al 10 de noviembre se evaluaron 170 pacientes con traumas oculares producidos durante las manifestaciones, la mayoría (88%) provenientes de la Región Metropolitana. Del total de casos, 147 heridos (86,5%) fueron hombres y 23 mujeres (13,5%) .
La misma estadística indica que los pacientes que presentan daños en sus ojos tienen entre 12 y 69 años. Del total de lesionados, 33 (18,9%) presentaban "traumatismo ocular con globo abierto", siendo la causa principal de estas heridas los cuestionados balines (80,2% del total).
A esa cifra, el Colegio Médico explicó que se deben sumar otros 60 casos atendidos en otros recintos asistenciales, por lo que el total superaría los 230 casos.
Equipo multidisciplinario
En el Minsal se explicó que el nuevo programa implica que la atención debe ser gratuita y el hospital tiene que contar con un equipo multidisciplinario, integrado por oftalmólogos, cirujanos, psicólogos, cirujanos plásticos y terapeutas ocupacionales. Esto con el fin de optimizar las capacidades funcionales de las personas afectadas.
Mañalich destacó que "son las reparaciones y atenciones que tienen un foco en cirugía, inserción de lentes intraoculares, reemplazos de cristalinos, suturas, prótesis, manejo de ayudas visuales. Iremos mucho más allá de lo que la canasta Auge entrega como garantía explícita en salud, y esto es extensivo a todas las personas del sistema público o privado".
Respecto de el tema de las lesiones oculares, los distintos gremios y funcionarios de la salud han solicitado al gobierno, en reiteradas oportunidades, el cese del uso de balines para disuadir a los manifestantes, debido a la cantidad de heridos que han llegado a los recintos asistenciales.
Enrique Morales, presidente del Departamento de DD.HH. del Colegio Médico, aseguró el sábado recién pasado, luego de darse a conocer el caso de Gustavo Gatica, joven que fue herido por balines de Carabineros en ambos ojos, que "empezamos a denunciar esto cuando habían 29 ojos perdidos, hoy van más de 200. Hemos tratado de dialogar en todas las formas".
Agregó que "llamamos a las autoridades de este país a detener el uso de las balineras. Ya no es posible seguir soportando una situación en que más personas pierdan los ojos".