Hace un mes, el martes 31 de julio, las redes sociales y radios locales de Dalcahue, en Chiloé, comenzaron a emitir alertas producto de un enorme socavón, de 35 metros de profundidad, situado junto al camino rural que conecta la Ruta 5 con el sector de Las Compuertas. En rigor, el enorme agujero, de más de 40 metros de diámetro, no era nuevo. Tenía meses, años, nadie lo tenía muy claro. Pero allí estaba. Y crecía.
"En ese sector, en realidad, hay dos grandes socavones, y uno ha avanzado paulatinamente durante los años. Cada vez está más cerca del camino", alertó el diputado Alejandro Bernales (PL), quien denunció el hecho junto a familiares residentes de la zona.
La inquietud de los vecinos tiene que ver con el progresivo avance de los socavones, algunos de los cuales llegan incluso hasta algunas viviendas. Paula Colívoro, vecina del sector de Las Compuertas y presidenta del comité de adelanto de la zona, explicó que se trata de una situación compleja: "Sabíamos que Sernageomin estaba haciendo un estudio, pero no hemos visto mayor preocupación por parte de nadie, como comité estamos trabajando solos".
La misma vecina indicó que "muchos animales vacunos se han precipitado en estos hoyos".
En efecto, el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) elaboró un informe y detectó 24 socavones en esa área, que técnicamente se denominan "remociones de masa". El estudio se denomina "Evaluación de las remociones en masa del sector Mocopulli-río Carihueico, comuna de Dalcahue, provincia de Chiloé, Región de Los Lagos". En el documento se especifica que estos elementos tienen una data que supera los 10 años.
Según este informe, la primera alerta ciudadana de las remociones se produjo el pasado 12 de abril, a través de redes sociales, respecto de la Ruta W-450, en Dalcahue.
En las conclusiones del documento, tras peritajes en terrenos y observaciones con drones, entre otros, se dice que "en el área del río Carihueico-Mocopulli se identificó un total de 24 remociones en masa del tipo deslizamiento".
Se agrega que sobre la base de la observación a cuatro remociones, "es posible concluir que los fenómenos en el área son fenómenos naturales, frecuentes, producidos por la movilización de sedimentos no consolidados, desde el nivel de terrazas glacio-fluviales".
También se concluye que existe "una relación directa en el cambio de uso de suelos y la cantidad de deslizamientos", apuntando a la deforestación del bosque nativo para fines ganaderos, además de "canales o drenajes antrópicos que aceleran las remociones en masa", entre otros.
También se efectúan algunas recomendaciones, como redirecciones de ciertos cursos de agua, poner señalética en la zona, aumentar el monitoreo y analizar la factibilidad de una reforestación.
Paul Duhart, geólogo y jefe de la Oficina Regional de Sernageomin, con asiento en Puerto Varas, explicó que desde abril se están realizando estudios ante la presencia de los socavones. "A fines de ese mes estuvimos en el área e investigamos las remociones en masa. Nos dimos cuenta de que eran varias y decidimos constituirnos en terreno. Hemos estudiado algunas de ellas y el informe ha sido remitido al alcalde de Dalcahue, la Gobernación de Chiloé, autoridades políticas y a la Onemi regional", indicó Duhart.
Agregó que "estas remociones avanzan en el tiempo y podrían, eventualmente, afectar la conectividad, por lo que también informamos al Ministerio de Obras Públicas".
El terreno afectado por los socavones presenta diversas características. La más grande tiene cerca de 40 metros de profundidad y forma parte de una "terraza glaciofluvial", de acuerdo a lo señalado en el informe de Sernageomin.
El alcalde de Dalcahue, Juan Hijerra, explicó que "en el socavón gigante se hizo una zanja para desviar las aguas lluvias y que no siga aumentando. También pedimos que se ponga señalética, porque muchos curiosos se acercan al sector, los turistas vienen a sacarse fotos y es muy peligroso".