El barrio que está compuesto por la avenida Rojas Magallanes y una serie calles con nombres de países, en la comuna de La Florida, este año no lo ha tenido fácil. Los delincuentes han fijado este sector como uno de los "preferidos" de la zona oriente de Santiago a la hora de robar domicilios.

De hecho, según las cifras del Ministerio Público, fue justamente este barrio, identificado como el cuadrante 169, donde ha ocurrido el mayor número de estos ilícitos. Concentra 72 casos, de los 1.480 episodios del sector entre el 1 de enero y el 31 de mayo de este año.

Eso sí, no es el único barrio de preocupación. La Fiscalía Oriente, a través de un requerimiento vía Ley de Transparencia, informó que son cinco los sectores que lideran los robos a casas, y que son llamados por las autoridades policiales como "zonas rojas". Además del mencionado cuadrante de La Florida, aparecen otros dos en Providencia y dos más en La Reina (ver infografía).

A nivel estadístico comunal, las cifras de robos a casas son estas: 239 ocurrieron en Las Condes, 38 en Lo Barnechea, 66 en Vitacura, 159 en La Reina, 234 en Ñuñoa, 237 en Providencia, 302 en La Florida, 131 en Peñalolén y 74 en Macul.

Para el alcalde de La Florida, Rodolfo Carter, lo ocurrido con el cuadrante 169 tiene una explicación: "Son las propiedades más tradicionales de la comuna, de 1.000 metros cuadrados, casas antiguas, muchas de ellas con familia de avanzada edad. Entonces, se mezcla esto con déficit de seguridad y personas con ingresos razonablemente altos, que son muy atractivos para delincuentes que vienen de zonas aledañas", dijo.

Agregó que "a eso hay que sumarle que esa zona tiene muy fácil conexión con la autopista, que es el gran conector del delito del suroriente". El edil destacó que para enfrentar esto cuentan con servicio de vigilancia de dron y han puesto barreras de reducción de velocidad en estas calles.

La segunda zona con mayor número de casos es la que está ubicada entre las avenidas Vicuña Mackenna y Providencia, y las calles Santa Isabel y Manuel Montt, en la comuna de Providencia. Es el llamado cuadrante 124.

Y el tercer sector que registra la mayor incidencia de estos ilícitos es el que está ubicado entre las avenidas Francisco Bilbao, Tobalaba, Américo Vespucio y las calles Simón Bolívar, Florencio Barrios y Vicente Pérez Rosales, en La Reina, con 61 casos durante el período. De hecho, es el mismo barrio donde en mayo una mujer de 63 años murió tras haber sido víctima de un violento asalto en su casa.

El edil de La Reina, José Manuel Palacios, dijo que, "como municipio, hemos trabajado sin descanso para realizar acciones concretas sobre el territorio, ejecutando podas preventivas y despejando luminarias para hacer que nuestras calles sean más seguras".

Además de La Reina, durante 2018 hubo otra víctima fatal por este delito en Lo Barnechea. Se trató de un joven de 28 años, quien murió luego de recibir varios disparos de parte de asaltantes mientras trataba de repeler un atraco en su domicilio.

Para el alcalde de Lo Barnechea, Felipe Guevara, además de una serie de medidas que ha implementado el municipio para enfrentar la delincuencia, algo fundamental es "empoderar a la comunidad a través de redes y medios tecnológicos, como un botón que portan en su celular". Agregó que "somos la municipalidad que más invierte en seguridad ciudadana en Chile como porcentaje de presupuesto".

Con moradores

De los 1.480 robos a casas, 76 fueron con intimidación, es decir, había personas en la residencia al momento de ocurrido el atraco, las que fueron amedrentadas por delincuentes. Pese a que es un porcentaje menor, estos destacan por ser de un alto nivel de violencia y generar una elevada sensación de inseguridad.

"Nunca más después de un asalto con cinco personas, que te pegan en la cabeza con palos, que te quiebran los dedos y las costillas, voy a dormir tranquila", dijo Rozer Aznar, quien en noviembre pasado fue víctima de un robo en su casa, en el sector de El Arrayán, en Lo Barnechea. Destacó que "una sicóloga y un abogado de la municipalidad no dejaron de darme apoyo, eso fue una ayuda excepcional".

Un caso similar vivieron M.C.Z.D. y su marido en el sector de la Plaza San Enrique, en Lo Barnechea. "El robo nuestro fue muy traumático, porque fue el delincuente directo al dormitorio donde estábamos durmiendo. Fuimos afortunados, en el sentido de que no fuimos agredidos. Teníamos la alarma puesta y con el apuro buscaron en lugares específicos y no encontraron nada y se fueron", señaló.

De acuerdo a la víctima, "esta experiencia es bueno compartirla, porque a veces hay ciertas cosas preventivas que pueden ayudar cuando uno está súper a la deriva".