Fue una mañana de esas extrañas: con una disputa interna ventilada en matinales, con idas y vueltas y con una mediática seremi asegurando que no había aceptado un cargo en el que ya había sido anunciada. Rosa Oyarce, secretaria regional ministerial de Salud para la Región Metropolitana, señaló que fue desvinculada de su cargo y que estaba molesta, señalando además que pensaría si se reincorporaba o no en el rol de asesora en que fue presentada minutos antes.
Hay algo seguro: si hasta inicios de este año Wuhan era una ciudad no muy conocida a nivel mundial, hoy no hay quien pueda ignorar el nombre de esa metrópoli china, el punto de origen -hasta donde se conoce- de la pandemia que azota a todos los países. Por eso, Wuhan es, de alguna forma, el futuro, dado que van más adelante en los procesos. Y por eso hay una pequeña luz de esperanza: hoy la urbe terminó con 76 días de cuarentena, autorizando con muchísimas restricciones los desplazamientos de sus habitantes.
Se ha anunciado por parte del gobierno: las ayudas irán en escala y como parte de un amplio programa de apoyos. En ese sentido, el presidente Sebastián Piñera anunció este miércoles una nueva iniciativa que apunta a las pequeñas y medianas empresas, con líneas de crédito que tendrán garantía estatal, mientras esbozó líneas de nuevos beneficios dirigidos sobre todo a los profesionales independientes.
Si hay un área que está revolucionada con las cuarentenas y el distanciamiento social es la televisión. Por supuesto, ya no hay programas con público, pero los cambios han sido amplios: conductores animando desde sus casas, videollamadas como elemento permanente de contacto y un tono más íntimo a cambio de una merma en calidad de audio y video de algunos contenidos, como se vio en la Teletón, son el sello de esta compleja etapa.