En las últimas semanas, cuatro nuevos miembros se incorporaron al Cuerpo de Bomberos de Santiago. Se trata de una flotilla de cuatro camiones portaescalas de última tecnología, preparados para combatir la amenaza de siniestros en altura, agudizada por los cambios que muestra una capital poblada cada vez más por edificios de gran tamaño.

Estos vehículos poseen escaleras con el despliegue más veloz disponible en Chile para equipos de este tipo. Tardan menos de un minuto en llegar a su máxima extensión, una capacidad crucial para brindar una rápida vía de escape a quienes queden atrapados por el fuego.

Las estructuras destacan por su extensión de 23,2 metros, que las sitúa entre las escaleras bomberiles más altas de Chile. Pueden aguantar el peso de hasta nueve personas al mismo tiempo, lo que hace posible acelerar el rescate de personas en altura. Incluso permiten acoplar camillas para evacuar lesionados, y desde el extremo de la escalera un pitón puede arrojar agua directamente en los pisos afectados por el fuego.

Los carros también poseen equipamiento de última tecnología. Todos ellos están equipados con puertos USB en los puestos de copiloto, diseñados especialmente para la conexión de tabletas destinadas a facilitar a los bomberos el acceso a mapas digitales e información crucial para llegar a tiempo a las emergencias.

Cada cabina posee otra novedad: una pantalla en el puesto del conductor, conectada a cuatro cámaras en el exterior del vehículo, que permite monitorear el desplazamiento del camión en espacios acotados y en el momento de estacionarlo para el despliegue de la escalera.

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Las cabinas tienen puertos USB y pantalla para conductor. Foto: Patricio Fuentes[/caption]

La presentación de los nuevos vehículos se realizó en el Centro de Entrenamiento de la institución bomberil, ubicado en Colina. Allí fueron mostradas otras características de los camiones que resultan útiles para el combate contra el fuego. Por ejemplo, disponen de espacio suficiente para transportar a un conductor y nueve voluntarios, con mayor comodidad que modelos anteriores. En ejemplares más antiguos, los bomberos tenían que ingresar por la parte trasera y se sentaban en fila, uno al lado del otro y sin medidas de seguridad. Los carros nuevos, en cambio, están provistos con butacas individuales, y una alarma sonará si algún tripulante no lleva puesto su correspondiente cinturón de seguridad.

Los camiones incluyen bandejas desplegables para el material de rescate, como hachas o motosierras, que facilitan un acceso más cómodo y seguro a estos implementos.

Las nuevas máquinas fueron enviadas a las compañías Sexta, Séptima, Octava y Decimosegunda del Cuerpo de Bomberos de Santiago (CBS). Estarán listas para salir a la calle a combatir emergencias a partir del domingo.

Gabriel Huerta, comandante del Cuerpo de Bomberos de Santiago, resaltó la importancia de la adquisición para incrementar la capacidad de combate contra el fuego en la capital. "Estamos muy orgullos con esta renovación que implica la llegada de carros de vanguardia, los que reemplazarán a otros que están cumpliendo 20 años de vida útil", describió.

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Los vehículos poseen bandejas desplegables para equipos.[/caption]

Del mismo modo, puso énfasis en la renovación tecnológica que implica la incorporación.

"Esta flota nos aportará tecnología mecánica de última generación en las compañías de escala, lo que irá en directo beneficio de la comunidad", agregó.

Desde la empresa proveedora de los carros, Pesco Spartan, su product manager, Matías Viveros, resaltó que la firma actuó en este plano como "aliado" del Cuerpo de Bomberos.

"El desarrollo de estas unidades fue un desafío para nosotros, ya que los carros portaescala tradicionales tenían que fundirse, en capacidades, con los carros telescópicos. Es como mezclar las características de dos carros en uno", explicó.