Alrededor de las 11.00 horas de este miércoles un artefacto incendiario explotó en un baño del Internado Nacional Barros Arana (INBA). Más allá de la afectación a la infraestructura del establecimiento, trágicamente una treintena de alumnos resultaron heridos y hospitalizados, aunque dicha cifra disminuyó esta mañana: diez de ellos fueron dados de alta y veinticinco permanecen hospitalizados.
Tras la explosión, la Fiscalía Centro Norte comenzó las indagatorias para esclarecer lo ocurrido y la teoría que barajan es que habría ocurrido por la manipulación de una bomba molotov. Este no es el primer hecho de esta índole, el uso de artefactos incendiarios caseros en protestas estudiantiles se ha vuelto común, por lo mismo, en 2018 se despachó la Ley Aula Segura como una herramienta para que las autoridades educativas puedan sancionar severamente estas y otras conductas peligrosas.
Pese a que la lista de incidentes es más extensa, hay casos que se siguen recordando por su gravedad. En 2009 un grupo de escolares atacó con bombas molotov a una radiopatrulla de Carabineros en la conmemoración del 11 de septiembre de 1973. Siete años más tarde las consecuencias del lanzamiento de explosivos tuvieron mayor envergadura en el Liceo Bicentenario Teresa Prat. En ese entonces, alumnos de dicho recinto provocaron un incendio en el techo lo que movilizó a cinco carros de Bomberos para contener las llamas. Pese a que el siniestro fue controlado, la infraestructura sufrió daños graves.
En junio del mismo año el director del Liceo Valentín Letelier expulsó a un grupo de alumnos que lanzaron bombas molotov a uniformados mientras controlaban disturbios por protestas a las afuera del establecimiento.
Recientemente, en julio de 2023 un alumno del Liceo de Aplicación –que en ese entonces estaba en toma– quedó con quemaduras de gravedad y permaneció internado en riesgo vital por una explosión en su rostro. El afectado portaba un líquido acelerante para encender un artefacto, y acorde a Carabineros eso provocó el incidente.
Dos meses después de este hecho una decena de menores de edad del Instituto Nacional quemaron los accesos con bombas molotov para intentar salir del colegio. En noviembre del mismo año, también en el Nacional, un alumno resultó con quemaduras graves tras manipular una bomba molotov que intentó lanzar contra Carabineros. En el mismo recinto en 2022 una sala fue quemada completamente producto del lanzamiento de estos mismos elementos.