Luego de que se conocieran los resultados de la investigación encargada por la Compañía de Jesús al abogado Waldo Bown en el marco de las acusaciones de abuso sexual contra el excapellán del Hogar de Cristo, Renato Poblete, la teóloga Marcela Aranda, una de las denunciantes, expresó estar "satisfecha" con el informe elaborado y agradeció a la congregación por su "pronunciamiento claro".

El documento reveló que al menos 22 mujeres fueron abusadas por el fallecido sacerdote y cuatro eran menores de edad al momento en que ocurrieron los hechos. En tanto, en al menos una denuncia de aborto, hay antecedentes que acreditan la participación del jesuita.

La Congregación, a través de su provincial, Cristián del Campo, pidió perdón a las víctimas y reconoció que "el aparente éxito en su labor apostólica omnibuló nuestra capacidad de supervisar su vida cotidiana y controlar debidamente su manejo de dineros", dijo, agregando que esto fue lo que permitió al acusado "utilizar ese poder para abusar de mujeres".

Tras conocer dicho informe, Aranda expresó que quedó "satisfecha con el diligente trabajo del abogado Waldo Bown y deseo destacar su profesionalismo y su acogida empática de las víctimas", escribió en un comunicado que fue compartido en su cuenta de Facebook.

La teóloga sostuvo que está "especialmente agradecida con la Compañía de Jesús en la persona de su Provincial, Cristián del Campo, por la decisión tomada de que la investigación se realizara de manera independiente en pro de la transparencia, la verdad y la justicia".

"Todo este largo período, desde que hice la denuncia eclesiástica, el año 2018, hasta hoy, ha sido tremendamente duro y desgastador para mí y también para quienes me han apoyado y acompañado en todo este tiempo", agregó.

Además expresó que "el proceso de reparación es largo y muy difícil. Pero la entrega de este informe y el pronunciamiento claro de la Compañía de Jesús del día de hoy, ciertamente son un paso importante, que valoro mucho y que me está ayudando grandemente en este doloroso proceso de recuperación".

El descarnado testimonio de Aranda se conoció el pasado 29 de abril a través de una entrevista televisiva en que la mujer relató que fue abusada por el sacerdote durante ocho años (entre la década del 80 y el 90) quien además la llevaba con otros hombres para que la violaran de manera grupal.

En esa oportunidad, la mujer también contó que el excapellán del Hogar de Cristo la "obligó a abortar no una, sino tres veces".