Marcial Sánchez, doctor en Historia, sobre término de congregaciones religiosas: "Esto va a ser una tendencia en el tiempo"

La baja de vocaciones al sacerdocio y a la vida religiosa en Chile es para Marcial Sánchez, doctor en Historia y director de la colección Historia de la Iglesia en Chile, el principal motivo de por qué las congregaciones se están retirando del país. El experto pronostica que el fenómeno irá en aumento, hasta que muchas de ellas dejen de existir.

¿Es Chile un país atractivo para las congregaciones?

No. Chile es un problema complejo a nivel mundial en términos católicos. Cuando Charles Scicluna habló de abrir la caja de Pandora se refería a abrir todos los males. La excepción se da si estas congregaciones son misioneras, pues lo que buscan es levantar el Espíritu.

¿Qué factores influyen en su salida del país?

Las congregaciones religiosas cesan en algún lugar por tres motivos fundamentales. El primero es por falta de vocaciones. Un segundo elemento se presenta cuando hay algunas diferencias que tiene la congregación respecto de su filial de sede. Se puede cerrar porque la misión que estaban llevando a cabo en el lugar no está acorde con lo que está pasando en esa zona. Y hay un tercer punto que tiene que ver con una situación de descrédito de la congregación dentro del país.

¿Cómo enfrentan las congregaciones este tema?

Tienen varias posibilidades de actuar. La primera es que tomen sus propiedades y las vendan para poder mantenerse, pero hoy también se está desarrollando otra metodología. Si una congregación tiene sedes en otro país, se trasladan allí donde hay mayor nivel de vocaciones o sacerdotes y religiosas activas. Por ejemplo, México y Brasil tienen una buena cantidad de vocaciones. Son pocas las congregaciones que se cierran por orden papal y mueren definitivamente.

¿Por qué se van más congregaciones femeninas que masculinas?

En el caso de las mujeres, hoy las religiosas buscan espacios de misión de otra forma. Creo que la mayor salida de mujeres tiene que ver con el proceso vocacional (…). Estamos hablando de congregaciones de 10 personas, en las que se les va una y no tenían cómo elegir superiora, como en el caso de las Carmelitas Descalzas de Viña del Mar. Por lo tanto, tenían que cerrar.

¿Podrían llegar a desaparecer las congregaciones en Chile?

Hay órdenes religiosas que existen desde el período colonial, como los dominicos, los franciscanos, los agustinos y los mercedarios, que están tan anquilosadas en este país que es muy difícil que cierren y no creo que vayan a desaparecer. Pero las congregaciones, cuando son formadas por pocas personas, van a desaparecer. Esto va a ser una tendencia en el tiempo.