A una semana de la celebración de Halloween, el seremi de Salud de la Región Metropolitana, Gonzalo Soto, lideró este martes una fiscalización a disfraces y accesorios a la venta en los distintos comercios de la capital, y que están destinados para el uso de niños y adolescentes.
Desde la calle Rosas, en la comuna de Santiago, la autoridad sanitaria entregó un balance de los productos que fueron retenidos y de los locales que arriesgan multas por no cumplir con la normativa. Así, informó que se hasta la fecha se han decomisado más de 3.300 artículos y se han realizado 17 sumarios sanitarios.
El objetivo, dijo Soto, es “disminuir los riesgos para niños, niñas y adolescentes de quemaduras y también asfixias”. En ese sentido, recomendó a las familias y cuidadores comprar en lugares establecidos, que el rotulado esté en español y con letra legible, que se dé cuenta de la empresa que importa el producto y del país desde dónde proviene, y estar atento a la edad para la cual están recomendados los productos.
A la hora de buscar un disfraz para estas fechas, el seremi de Salud RM fue enfático en que se considere, por ejemplo, la anatomía del niño o adolescente que lo utilizará. “Si vamos a comprar una máscara tiene que coincidir en los orificios de los ojos y también con la nariz, para evitar caídas y asfixias. Es uno de los riesgos que se pueden dar en este tipo de situaciones”, sugirió.
Asimismo llamó a evitar “comprar espadas o palos que puedan provocar accidentes para los niños” y disfraces muy largos. Esto, “para evitar dos cosas: primero, que puedan tomar contacto con alguna llama o alguna vela y que puedan provocar algún accidente por inflamabilidad o alguna quemadura, y también, por supuesto, para evitar caídas”.
“También hay estar muy atentos al rotulado, porque un producto que no esté debidamente rotulado, que de cuenta del origen, a la edad en que se recomienda o disfraces y accesorios con partes pequeñas, pueden, por ejemplo, obstruir por accidente las vías respiratorias de un niño. Eso es un riesgo muy importante que hay que evitar y que se da lamentablemente en muchas situaciones durante estas fechas y también durante navidad. También evitar productos que sean muy inflamables y que puedan generar consecuencias negativas en la salud de niños y niñas por quemaduras, por una situación completamente evitable”, complementó.
Además, se refirió a ciertos “componentes que puedan tener algunas mascaras o gomas, por ejemplo, que tengan tolueno u otras sustancias químicas que sean perjudiciales para la salud, y materiales pesados, por ejemplo, a la hora de usar maquillaje. Eso se certifica con el Instituto de Salud Pública (ISP)”.
Los productos decomisados no contarían con el registro del ISP, lo que indica que no han sido revisados por la autoridad competente y suponen un riesgo para la salud de niños y adolescentes que quieran usarlos.
Multas de hasta mil UTM
Respecto a las multas a las que se arriesgan los comerciantes que incumplan la normativa, la autoridad sanitaria señaló que “ellos se exponen, en primer término, a multas que van desde 1 UTM hasta 1.000 UTM, eso son casi 60 millones de pesos si hay reincidencia y ese tipo de cosas”.
En la misma línea, Soto que las principales causas de los sumarios son los productos sin rotulación y aquellos que no acreditaron la calidad del artículo mediante informes de ensayos de inflamabilidad.
“Principalmente no acreditan la procedencia del producto, que pasan por muchas pruebas de calidad cuando se importan a nuestro país. Al presentarlo ante la Seremi, tienen problemas con la inflamabilidad, cuando la recomendación es que sean productos que no sean rápidamente inflamables”.
Y precisó que “por supuesto que (estos productos) son inflamables, pero es muy importante que la velocidad de la inflamación sea lo mas dilatada posible”.