Los árboles y tendido eléctrico que fueron derribados en la región Metropolitana por ráfagas de vientos de más de 100 kilometro por hora, siguen siendo un problema para los vecinos de las comunas afectadas. A casi una semana de los primeros daños y cortes del suministro eléctrico que dejó el sistema frontal, la ministra de Defensa Nacional, Maya Fernández, anunció que 120 efectivos militares se desplegarán para realizar labores de despeje en las zonas criticas.
La titular de la cartera se reunió con el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic, y el delegado presidencial de la RM, Gonzalo Durán, para dar a conocer un plan de limpieza de la ruta Camino a Melipilla, que se encuentra cortada en ciertas zonas por árboles caídos.
En dicha instancia, Fernández explicó que las cuadrillas de uniformados prestarán apoyo en Pudahuel, Lampa, Quilicura y Maipú, luego de que el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) realizara un requerimiento al Ministerio de Defensa.
“El Ejército como siempre ha actuado rápidamente, esta solicitud llegó ayer y ya estamos acá para apoyar en todo lo que es la remoción de escombros, de árboles, que es muy necesario en este momento”, señaló Fernández.
Por su parte, el delegado Durán destacó la labor de los militares, pero precisó que “la responsabilidad de restablecer el suministro eléctrico y por tanto de desarrollar las actividades complementarias que permitan restablecer la energía es de las empresas”.
“La Asociación Chilena de Municipalidades y Senapred, nos constituimos en dependencias de Enel para retirar árboles en redes de baja tensión y ya hemos retirado más de 400. De manera que esta no es una tarea nueva y no es que el Estado no haya estado permanentemente trabajando para suplir una responsabilidad de la empresa. Los cables y los postes son de responsabilidad exclusiva, por ley y razones técnicas, de la empresa eléctrica. Y allí también hemos hecho un esfuerzo”, señaló Durán.
En tanto, el alcalde de Maipú recalcó: “Es solo una falta de operatividad, es de verdad un nivel de indolencia y falta de transparencia. Nos llama mucho la atención y nos duele porque somos nosotros los alcaldes y alcaldesas de todo Chile los que hemos tenido que ir a los distintos barrios a poner la cara por una empresa ineficiente, poco transparente y que no nos da la información. Ante esta situación hemos debido como Estado hacernos cargo y desplegarnos al máximo de nuestras capacidades, porque entendemos lo que están sufriendo miles de familias de nuestra comuna y de toda la región”.