“Estamos en una situación delicada, y si seguimos con este aumento de casos -que se ha verificado en las regiones del sur y norte- tendremos una situación difícil para la cual nos estamos preparando”, dijo ayer el ministro Enrique Paris.
Y aunque el titular de Salud recalcó en una entrevista radial que uno de los objetivos de la estrategia sanitaria es evitar que los pacientes lleguen a ser hospitalizados, parte importante de los preparativos frente a una nueva alza de casos están radicados en la red asistencial.
El pasado miércoles, en una cita con los prestadores privados, a la que asistieron el subsecretario de Redes Asistenciales, Alberto Dougnac; y el coordinador nacional de las camas críticas del Minsal, el exsubsecretario Luis Castillo, se les presentó la hoja de ruta para llegar a las 3.216 camas habilitadas el 9 de junio, es decir, cuando se produjo la máxima capacidad. Como red integrada, en la primera ola, las clínicas aportaron cerca del 40% de la capacidad.
En una primera etapa, los centros asistenciales deberán aumentar su capacidad en un 35% la próxima semana. Así lo confirma el exsubsecretario Castillo:
En las conversaciones con el sistema privado dentro del manejo de la red integrada, la primera meta adquirida es que las clínicas de aquí a la próxima semana, es decir, en siete días, deberán aumentar un 35% el numero de camas activas. Hoy existen 640 camas de cuidados intensivos (UCI) abiertas en el sector privado.
Luis Castillo, coordinador red privada Covid-19
A nivel nacional, ese aumento se traduce en aproximadamente 224 cupos UCI extra, totalizando un poco más de 860 de capacidad en la red privada al finalizar la próxima semana. Lo anterior, debería quedar plasmado en un decreto ministerial en el Diario Oficial.
En otras palabras, el subsecretario Alberto Dougnac explica que estos nuevos 200 cupos “buscan alcanzar el 62% del total de camas aperturadas en el peor momento de la pandemia”.
Sin embargo, la meta de expansión de camas es aún más ambiciosa. Castillo afirma que esperan que a fines de enero, o durante los primeros días de febrero, el sector privado alcance “1.100 UCI, que es la base que se habilitó durante el peak de máxima capacidad de la red”.
Clínicas se preparan
En Clínica Indisa, uno de los centros privados que durante la primera ola llegó a tener la mayor capacidad de cupos críticos de internación, su jefe de la Unidad de Paciente Crítico, el doctor Sebastián Ugarte, confirma que ya está en marcha en su centro clínico la directriz ministerial: “En período normal manejamos 80 camas críticas y desde diciembre convertimos hasta llegar a 120. Y ahora, ante esta nueva solicitud estamos generando seis camas de UCI que se están activando”.
Sin embargo, el intensivista advierte que existen limitantes para aperturar más cupos en la red: “De momento, el objetivo que nos pusimos era incrementar en esas camas, que es lo que podíamos hacer. Y si hay una nueva solicitud, que como jefe de servicio aun no se me ha transmitido, habría que ver... Es complejo aumentarlas mucho más, no por las camas, sino que por el personal”. Ugarte explica que “hay entre un 25% y un 30% de personal con licencia médicas y aumentar seis camas en un par días, es un esfuerzo sobrehumano”.
Hacia el sur, desde la red de prestadores Andes Salud y sus clínicas en Concepción y Puerto Montt, señalan que en la Región del Biobío, su centro “aumentará un 50% su dotación de camas críticas actuales, pasando de seis camas UCI a 10 y ampliando su capacidad de 14 camas UTI a 20. Es decir, se incrementarán 10 camas adicionales que estarán habilitadas a partir de la próxima semana”.
En la Región de Los Lagos, donde ya hay una mayor presión asistencial, la Clínica Universitaria de Puerto Montt, también aumentarán sus camas críticas en un 50%, aportando un total de seis camas UCI.
Desde la Red Christus UC, y sus dos centros de complejidad en la Región Metropolitana (Hospital Clínico UC y Clínica UC San Carlos de Apoquindo) explican que ya han reportado al Minsal un aumento adicional del 72% de camas UCI en el recinto de calle Marcoleta; y Clínica San Carlos de Apoquindo llegará en los próximos días a un 100% de aumento. Este centro, hasta antes de la pandemia, contaba con ocho camas de intensivo.
Entre mayo y junio, la red UC llegó a tener 97 camas críticas entre ambos recintos asistenciales, lo que significó un aumento del 120% con respecto a la capacidad de marzo 2020.
Suspensión de cirugías
Otro de los puntos abordados en la reunión con los prestadores es que se definió que la suspensión de cirugías no urgentes o electivas será acorde a la demanda que reciban los prestadores. Se concluyó que esta no es homogénea a nivel país, por lo que aplicar la medida a nivel nacional podría traer consecuencias en la postergación de patologías crónicas.
“Dependerá de los directores de servicio junto con la orientación de la autoridad central, pero se va a estudiar caso a caso”, dice Castillo.
En tanto, y frente al empeoramiento de las cifras, ocho exministros de Salud de los anteriores gobiernos de centroizquierda hicieron una declaración pública donde llaman “a redoblar el cuidado entre todos”. “Estamos frente a un alza de contagios que nos hace temer un escenario aún más duro (…) es imperativo que el gobierno fortalezca urgentemente la trazabilidad y fiscalice vigorosamente el cumplimiento de las medidas (…)”, advierten.