Mylene Cartes (50) falleció el sábado 29 por causas que aún se investigan en el Hospital Barros Luco. La interna de la cárcel de San Miguel fue trasladada a dicho centro asistencial después de presentar dolores estomacales persistentes. A partir de este acontecimiento, y ante acusaciones de sus compañeras de celda de falta de auxilio y negligencia médica, la Fiscalía Regional Metropolitana Sur inició una investigación y ordenó a la Brigada de Homicidios realizar las primeras diligencias.
Como se trata de una reclusa, el centro penitenciario debió informar al Quinto Juzgado de Garantía de Santiago el fallecimiento de la interna. Esto para que la causa por microtráfico que se seguía en su contra y por la cual estaba privada de libertad sea sobreseída definitivamente por su deceso. En la tramitación de este caso Gendarmería ingresó un escrito en el que alude que la causa de muerte no sería una apendicitis mal tratada, como denuncian sus compañeras de celda y que se habría transformado en una peritonitis, sino más bien se trataría de un cuadro médico distinto.
En el documento de la entidad penitenciaria se detalla que a las 10:22 horas del sábado la imputada presentó dolores abdominales siendo derivada al Hospital Penal donde se le diagnóstico “infección de tracto urinario”. Luego, se lee en el informe, a las 18.35 horas y ante la persistencia de síntomas Mylene fue derivada nuevamente al recinto hospitalario, pero esta vez descompensada y “en calidad de hipotensa”, es decir una baja de presión fuerte. Según asegura Gendarmería, el médico de turno del centro penal entonces “la deriva de urgencia al Hospital Barros Luco bajo el diagnóstico de síndrome diagnóstico agudo shock hipovolémico, hipotensión secundaria”.
Ante el tribunal se detalló además el médico de turno del recinto hospitalario confirmó la muerte Cartes a las 21.00 horas de ese día y se adjuntó el certificado médico de defunción que establece como causa de muerte un “shock hipovolémico”, el que se originaría de un “síndrome diarreico agudo”. Inicialmente se sospechaba que la interna padecía de peritonitis, lo que al menos preliminarmente estaría descartado según los antecedentes médicos informados por el Hospital Barros Luco.
Pese a esto, aún está pendiente la autopsia bajo el Protocolo de Minnesota (sobre investigación de muertes potencialmente ilícitas) que fue solicitada por la Fiscalía Sur, ya que la mujer al momento de fallecer se encontraba bajo custodia del Estado.