Si ya Plaza Italia era considerada el punto de reunión y celebración preferido de los santiaguinos, en estas dos semanas también se ha consolidado como el epicentro de las manifestaciones sociales luego de que más de un millón de personas se concentrarán allí el pasado 25 de octubre. Las consecuencias del ajetreo social se reflejan todas las mañanas cuando la plaza se vuelve un descampado y se revelan los monumentos circundantes que han sido vandalizados. Sin duda, el más expuesto es el Monumento al General Baquedano, un conjunto escultórico en conmemoración a la Guerra del Pacífico, hecho por el artista Virginio Arias y el arquitecto Gustavo García en 1928; compuesto por la figura del general Manuel Baquedano arriba de su caballo Diamante y dos figuras en la parte del plinto: un soldado anónimo y una mujer quien porta una guirnaldas y que representa a la "Libertad".
Este sábado, ambas figuras fueron retiradas por personal del Municipio de Providencia en coordinación con técnicos del Consejo de Monumentos para evaluar los daños. "El soldado fue derribado y es el más dañado, perdió piezas, tiene un brazo fracturado y el fusil roto. La figura de la mujer está menos dañada, pero se estaba soltando en la base así que decidimos retirarla por precaución", cuenta Nicolás Cañas, arquitecto y director de del departamento de barrios y patrimonio del municipio. "Aún no tenemos una cifra precisa sobre lo que costará restaurar esta pieza, pero puede estar fácilmente sobre los $ 100 millones", agrega Cañas.
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El soldado anónimo, derribado por los manifestantes, fue retirado por personal del municipio de Providencia. Foto: Municipalidad de Providencia.[/caption]
Ambas figuras fueron llevadas a dependencias del municipio y hoy un equipo del Centro Nacional de Conservación y Restauración hará la primera evaluación de los daños. "Desde que empezaron las marchas estamos haciendo todas las mañanas un catastro del patrimonio dañado y no descartamos retirar eventualmente también la estatua del general Baquedano", afirma el arquitecto. Otras estatuas perjudicadas del sector son el Monumento a Manuel Rodriguez, la Fuente Alemana y el Obelisco de Parque Balmaceda.
En tanto, el Consejo de Monumentos Nacionales publicó una declaración donde lamentan el vandalismo al patrimonio cultural en cuanto es un "aporte clave al contexto urbano y a la identidad de un país y su destrucción afecta a la sociedad en su conjunto", dice. Y agrega "Cada generación puede someter los bienes públicos y patrimoniales a una revisión, debate, nuevas lecturas o enriquecimiento, sin embargo la manera de canalizar esos procesos es por la vía institucional dentro del debate democrático".
