La carta que el Papa envió a los obispos chilenos, la semana pasada, tras conocer el informe que elaboró el arzobispo de Malta, Charles Scicluna, enviado especial a Chile para recopilar antecedentes sobre el obispo Juan Barros, sigue generando reacciones al interior de la Iglesia.
Este martes fue el turno de referirse a este tema del obispo de Linares, Tomislav Koljatic, quien fuera formado por Fernando Karadima.
"Es un signo de preocupación, de cariño, de paternidad (...), tal como dice en su carta, quiere hacer un discernimiento, que nos escuchemos y ver qué podemos hacer entre todos para sanar estas heridas", indicó.
Añadió que "ustedes saben que yo nunca he sido acusado, en ningún tribunal. En ese sentido, estoy muy tranquilo. Mi disponibilidad es a colaborar y estar disponible para lo que ese discernimiento diga".
Al ser consultado sobre si tenía conocimiento sobre lo que ocurría al interior de la parroquia de El Bosque, Koljatic fue enfático: "Los abusos, como tales, son siempre personales, y en ese sentido me desligo de lo que otras personas han podido hacer. Yo no puedo responder por lo que hacen otros".
Respecto de las peticiones de renuncia en su contra, por parte de un grupo de laicos, dijo que "esto va más allá de la petición de personas. Eso es parte de las alternativas que el Santo Padre va a evaluar, y si el Papa lo pide, por supuesto, con mucho gusto, porque estamos buscando el bien de la Iglesia".
