Tras casi dos años de investigación la Fiscalía de Arica logró que los líderes de la red de tráfico internacional de inmigrantes de Chile fueran condenados a 30 años de presidio dando un total de 99 años en para todos los miembros de la banda.
Se trata de Soledad Maquera y Juan Castillo, quienes fueron extradirados desde Perú a Chile en abril de este año. La primera recibió una pena de 5 años por asociación ilicita y 12 por ser autora de tráfico de personas, dando un total de 17 años, y el segundo a un total de 13 años (3 por asociación ilicita y 10 como autor de tráfico de personas).
La red internacional de tráfico de migrantes fue desbaratada el año 2016 tras un inédito operativo simultáneo en Chile y en varias ciudades del Perú, conocido como "Operación Desierto" dirigida por la fiscal regional Javiera López junto al persecutor Daniel Valenzuela y el OS-9 de Carabineros.
El trabajo en conjunto permitió la detención de cuatro personas de nacionalidad peruana en Tacna (frontera con Chile) y Sullana (limite con Ecuador) que eran parte de está red.
Cabe recordar, que a finales de octubre los cuatro fueron formalizados: Reyna Huaringa, Yemeyel Morales y los hermanos Kliver y Kharlo Zárat, quienes fueron condenados a penas de entre 15 a 22 años como autores de tráfico de migrantes agravado, y tres años por asociación ilícita. Sumando en total 69 años de cárcel para los integrantes.
Tras el juicio contra los imputados se pudo constatar que al menos 200 personas, principalmente de Repúblicana Dominicada, ingresa de manera ilegal a Chile.
Al respecto el fiscal Valenzuela señaló, "con estas penas se cierra una etapa y se completan los dos juicios realizados contra toda la organización. Culmina una investigación compleja que se inició el 2016 y en la que se pudo acreditar que existía una organización y que las personas fueron traficadas sufriendo una serie de perjuicios y efectos psicológicos y físicos en los trayectos hacia Chile, donde incluso se desplazaron por zonas de campos minados y debieron soportar bajas temperaturas y zonas de mucha altitud. Por ello agradecemos toda su adherencia al proceso penal, su valentía al venir hasta Arica y dar su testimonio, pese a que muchos de ellos sufrieron vejaciones e incluso ataques sexuales".
La banda camtaba a personas que buscaban llegar a Chile con una visa de trabajo y poder establecerse en el país. Para ello, debían pagar entre 700 a 3 mil dólares a los sujetos y iniciar un viaje por avión hasta Colombia o Ecuador, luego continuaban su trayecto en buses o camiones hasta Perú. De ahí eran llevados a la frontera con Chile a través de la localidad Colchane (Región de Tarapacá) donde eran "dejados a su suerte" en un lugar minas anti personas.