Fue durante la preparación de su libro Traición a la Patria, en 2016, que el periodista Mauricio Weibel dice haber sido seguido por desconocidos. Individuos, según relató, que se le repetían una y otra vez, en diferentes actividades, tanto públicas como privadas. Durante ese tiempo, el profesional mantenía diversas reuniones con fuentes periodísticas y se encontraba en plena investigación sobre hechos de corrupción al interior del Ejército.

Según fuentes de inteligencia del Ejército a las que accedió La Tercera, Weibel fue víctima de actividades de espionaje desde la Dirección de Inteligencia del Ejército (Dine). La denominada Operación W, como se llamó a estas acciones, consistía en interceptaciones telefónicas y seguimientos.

"No me toma de sorpresa. Siempre sospechamos que esto existía, aunque es distinto a que salga publicado y existan antecedentes más concretos sobre el tema", indicó Weibel.

De acuerdo con el periodista, "había algunos tipos de seguimientos obvios y evidentes, además de dos asaltos al diario The Clinic mientras publicábamos allí reportajes sobre irregularidades en el Ejército, en los que solo robaron computadores. Las oficinas de algunas de nuestras fuentes fueron destrozadas, sin robarles nada. Hubo computadores hackeados cuando estaba en TVN. Se produjo una serie de situaciones que nos hacían sospechas que esto era así".

Weibel cree que todas estas acciones provenían desde la institución castrense: "Siempre he pensado que fue inteligencia del Ejército. Y hoy queda más claro que así fue", recalcó.

El autor relatará estos hechos este martes cuando se presente ante la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, donde fue invitado a exponer luego de conocido su caso, así como el de cuatro denunciantes de irregularidades en el Ejército monitoreados en la denominada Operación Topógrafo. Antes de ello, participará en un almuerzo al que fue invitado por la bancada de diputados de la DC.

Además, el periodista dijo que espera ser recibido en los próximos días por el fiscal nacional, Jorge Abbott, en compañía de miembros del Colegio de Periodistas, para entregarle directamente una denuncia penal por estos hechos. "Creemos que aquí se ha violado la Ley de Inteligencia, o al menos se ha faltado a la fe pública, o ha existido dolo contra los ministros de la Corte de Apelaciones", señaló.

Espina: "Se han hecho dentro del marco legal"

En tanto, al mediodía, el ministro de Defensa, Alberto Espina, defendió las tareas de espionaje denunciadas y aseguró que, según le manifestó el comandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, "han sido todas ellas autorizadas por un ministro de Corte de Apelaciones, quien requiere los antecedentes, los analiza y ve si corresponde hacerlo".

En esta línea, el secretario de Estado aseguró que desde el punto de vista del cumplimiento de la ley "las acciones de inteligencia se han hecho dentro del marco legal".

Espina también cuestionó la filtración de información clasificada, por lo que dijo haber enviado un oficio al Ministerio Público Militar. "Lo que nos parece un hecho delicado es que se puedan filtrar antecedentes que dicen relación con labores de los servicios de inteligencia en nuestro país", aseveró.