Luego que este sábado el gobierno presentara una querella en contra del sujeto imputado como organizador de la fiesta clandestina registrada esta madrugada, durante el período de toque de queda, en un recinto en la calle Copiapó, en la comuna de Santiago, la justicia resolvió dejar en prisión preventiva al imputado.
La magistrada Pilar Ahumada acogió la solicitud del gobierno en atención a que resulta ser proporcionada en atención a la situación actual del país, se cumplen con los presupuestos materiales de los artículos por los cuales se formalizo, existe flagrancia y la libertad del imputado organizador es considerada peligrosa para la seguridad de la sociedad.
Además se fijaron arresto domiciliario parcial y arraigo nacional para los otros dos imputados en la causa. El plazo de la investigación se estableció en 45 días.
La fiesta se realizó en un recinto usado como estacionamiento y lavado de vehículos. Tras las denuncias de vecinos por los ruidos molestos, personal de carabineros detuvo a 29 asistentes y al organizador, quienes quedaron a disposición de la justicia.
Más temprano el ministro del Interior, Gonzalo Blumel, condenó el hecho señalando que es “iInconcebible que algunos insistan en poner en riesgo vidas con este tipo de conductas, mientras todo el país lucha contra la pandemia”.
Por su lado, el intendente de la RM, Felipe Guevara calificó la actividad como “una estupidez”. “Tenemos una cifra cuantiosa de detenidos por esta irresponsabilidad de personas que se creen inmunes, superhéroes, inmortales, no se dan cuenta que hoy esta muriendo una persona cada 33 minutos por el virus en Chile y sabemos que el virus se contagia por contacto”.
