Orrego critica no haber sido convocado a cita por seguridad en La Moneda y dice que “Santiago necesita terapia de shock”

Este jueves el gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, junto a la alcaldesa de Quilicura, Paulina Bobadilla, el delegado presidencial RM, Gonzalo Durán, y el presidente de la Comisión de Seguridad del CORE, Felipe Berrios, se trasladaron hasta la calle Estadio Trasandino de Los Andes en Quilicura, para realizar una visita inspectiva a las obras del nuevo cuartel de la PDI de la comuna.

Allí, la autoridad regional abordó los anuncios de seguridad informados por el Presidente Gabriel Boric esta mañana, y si bien destacó las nuevas medidas, como la construcción de una nueva cárcel de alta seguridad, criticó fuertemente que las autoridades regionales no fueran también convocados a la discusión la jornada de ayer.

“Estamos viviendo uno de los momentos más críticos en materia de seguridad que ha conocido la historia de Santiago, y esto se enfrenta no solamente con buenas palabras y deseos, sino que con acuerdos entre todos los actores”, indicó. “Creemos que en estos momentos críticos se requiere unidad nacional, y también hacemos un llamado al gobierno que nos convoque a los alcaldes y a los gobernadores de todo el país, sobre todo de Santiago, es donde estamos viviendo la peor crisis, para ser parte de la solución”.

Chile, sostuvo, todavía está a tiempo de revertir “una situación que en poco tiempo más puede ser irreversible”.

“No queremos seguir el camino de algunos países hermanos de América Latina, donde la violencia y el crimen organizado se tomó las calles y dejó encerrados a los trabajadores y a las personas de bien. Estamos a tiempo, pero tenemos que sumar todas las fuerzas”, continuó.

En esta línea, destacó el gobernador que “aquí no sobran manos, faltan manos, y las manos del gobierno regional, que lo componen los 34 consejeros regionales, de todos los colores políticos, y los 52 alcaldes y alcaldesas de todos los colores políticos, están disponibles para colaborar. Pero para eso tenemos que estar sentados en la mesa”.

“Ojalá que los anuncios que se han hecho hoy día que van en la dirección correcta, se traduzcan en una convocatoria permanente para que hagamos del esfuerzo de seguridad de Santiago una tarea compartida”, afirmó.

Consultado sobre el anuncio por parte de Boric de construir una nueva cárcel, el gobernador destacó que a su parecer “se necesita urgentemente una cárcel de alta seguridad para el nuevo tipo de delincuencia que estamos teniendo en Chile”.

“El que controla la cárcel, controla la calle. Y ya lo hemos visto muchas veces, en Chile se cometen demasiados delitos desde la cárcel. En consecuencia, hacer una nueva cárcel, por supuesto va a ser importante”, expresó. “Ahora, pedimos que no sea simplemente una decisión desde arriba. Se consulte, veamos todas las alternativas, pero de que se requiere una cárcel de alta seguridad y de última generación en Chile para este tipo de criminales, violentos, feroces, con absoluto desprecio por la vida, se requiere”.

Por otra parte, y consultado sobre qué le parece la medida de toque de queda comercial para algunos locales comerciales que han solicitado algunas autoridades comunales, Orrego expresó que “aquí se requiere obviamente revisar las ordenanzas municipales”, ya que así como tenemos límites para las botillerías y discotecas, “hoy día hay un tipo de actividad comercial que está siendo usada como fachada para la comisión de delitos y de otras incivilidades”.

“Las barberías, una de ellas (...) yo creo que aquí tenemos que tener la facultad por parte de los municipios de regular de manera más estricta y de manera dinámica, porque esto va cambiando. Las barberías no era un tema en Chile hace 4 años, hoy día lo es”.

Asimismo, y ante la propuesta del senador José Miguel Insulza de establecer un estado de Sitio, Orrego sostuvo que “estamos en un momento crítico” y que por lo tanto “los momentos críticos y excepcionales requieren medidas excepcionales”.

“Hace un año nosotros planteamos la idea de un estado de excepción acotado en la Región Metropolitana para poder apoyar la labor policial con nuestras Fuerzas Armadas. Hoy día lo dicen los senadores, en este caso de gobierno. Yo apoyo esa medida, creo que requerimos mayor apoyo (...) Por supuesto, hagámoslo con cuidado. Pero yo he visto cómo se ha apoyado la labor policial en el sur y en el norte y me parece que va en la dirección correcta. Santiago necesita una terapia de shock”.

En esta línea, si bien indicó que esta medida “no es una varita mágica”, sí ayudaría la presencia y tecnología militar en algunos lugares para colaborar en la labor policial y en mejorar la sensación de inseguridad en los santiaguinos.

“No hay que pensar esta como una medida única. Se requieren nuevas cárceles, más policía en las calles, más prevención del crimen organizado, intervenciones psicosociales y también el apoyo de las Fuerzas Armadas. Al menos esa es mi convicción. El gobierno no lo piensa así. Vamos a seguir apoyando las otras medidas, pero yo creo que más temprano que tarde, espero que no sea más tarde que temprano, se va a aceptar esta idea del estado de excepción en Santiago”, expresó.