Ante la Cámara de Instrucción de la Corte de Apelaciones de París, en Francia, compareció hoy el exmiembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), condenado por la muerte del senador UDI Jaime Guzmán y el secuestro de Cristián Edwards, Ricardo Palma Salamanca, donde fue notificado de la solicitud de extradición pedida por la Corte Suprema chilena.
Fue a comienzos de este mes que se fijó la audiencia, luego de que en abril se enviara a la Procuraduría General de París el requerimiento. Y hoy, Palma entró en escena y se presentó ante los tribunales franceses, siendo captado por primera vez, desde 1992, por los medios de prensa (ver foto).
La jornada comenzó con incertidumbre, pues estaba en duda si "el Negro" se presentaría o no a la audiencia. Esto, porque solo Vincent Courcelle-Labrousse, el jurista que el gobierno chileno contrató en París para que lo representara, y los dos abogados de Palma entraron puntuales a la sala, lo que hizo pensar que quizás no iba a comparecer.
Sin embargo, unos minutos después de las 14.00 apareció Palma Salamanca, vestido de jeans y polera negra. Portaba, además, una mochila roja y una botella de agua. Lo acompañaba una mujer, quien sería una de sus cuñadas chilenas, que se sentó a su lado en el tribunal.
Inmediatamente, los abogados le advirtieron que había prensa presente. Los letrados avisaron también al gendarme encargado de la seguridad, quien recordó a los periodistas que las imágenes al interior del recinto estaban prohibidas, "so pena de una causa penal".
El chileno parecía tranquilo, a veces intercambiaba sonrisas con su acompañante, que le traducía algunas de las cosas que se decían en el recinto legal. Palma estuvo sentado durante cuatro horas y media y debió escuchar al menos una decena de pedidos de extradición antes de pasar al estrado.
El caso de una proxeneta nigeriana, de un traficante de drogas ucraniano o de una boliviana acusada de estafa en España fueron examinados antes que el suyo.
La espera en esa sala con mala ventilación y sobrepoblada era incómoda para el abogado chileno, quien bajó varias veces a fumar un cigarrillo. Palma estuvo siempre en el banquillo, mirando cada cierto tiempo hacia la prensa, intercambiando miradas fijas. Finalmente, cuatro horas después, cuando parecía que su turno llegaba, el exfrentista debió volver a sentarse, pues el intérprete español había desaparecido. Dos casos más, y al final llegó el momento de la notificación.
En la mesa de la corte, la jueza mostró el archivador y otros papeles de la demanda chilena. Le recordó a Palma las condenas a cadena perpetua por el asesinato de Jaime Guzmán y el secuestro de Cristián Edwards que tiene en Chile. Al mencionar el domicilio del chileno, la magistrada dijo: "Corte de Apelaciones de París". Luego le preguntó si entendía por qué estaba siendo notificado, y el chileno asintió.
Posteriormente, la jueza le preguntó a Palma si quería ser puesto a disposición de las autoridades chilenas. "No", respondió el condenado por el crimen del senador Jaime Guzmán.
El tribunal decidió notificar a Palma que la primera audiencia para analizar su posible extradición será el próximo 10 de octubre, y el abogado de Chile confirmó que el proceso "podría durar un año". Sus abogados no hablaron, tampoco el representante de Santiago.
El exfrentista salió del tribunal sin hablar con nadie y con la mirada puesta en un punto fijo al final del pasillo.
Larraín y la extradición
El ministro de Justicia, Hernán Larraín, se refirió al proceso de extradición de Palma Salamanca en entrevista con CNN Chile.
El secretario de Estado señaló que "esperamos que Francia pueda dar lugar a lo que nuestra Corte Suprema ha solicitado". Además, al ser consultado sobre la petición de asilo político del exfrentista en Francia, Larraín manifestó que "eso es una estrategia para salvarse de una condena judicial, pero estamos confiados en que la justicia responderá al pedido de Chile".
En tanto, el secretario general de la UDI, diputado Issa Kort señaló que "creemos que es una muy buena noticia y la valoramos. Esto avanza, no al ritmo que nos gustaría, pero a paso firme para hacer justicia".