La Brigada Investigadora del Crimen Organizado de la Policía de Investigaciones (PDI) desarticuló un polígono de tiro ilegal que estaba ubicado en la comuna de Quilicura.
En el trabajo policial seis personas resultaron detenidas: cuatro chilenos y dos venezolanos por delitos de infracción a la Ley de Armas y asociación Ilícita. Los venezolanos, en su país, habían ejercido como uniformados y acá eran instructores de tiros: uno era policía y el otro era militar. Posteriormente, un séptimo sujeto, también de nacionalidad venezolana, se entregó a la policía.
Los seis primeros sujetos ya fueron formalizados: cuatro quedaron en prisión preventiva.
De acuerdo a antecedentes de la causa, la policía estableció que la estructura criminal publicitaba en redes sociales cursos de tiro bajo el nombre de “V-Raptor”, y que obtenía armas y municiones para impartir las clases. Había dos cursos, uno básico y otro avanzado. Eso sí, no contaban con ni con los permisos ni con las autorizaciones legales.
Hasta el lugar también llegaban funcionarios policiales a practicar tiros. Se trata de tres funcionarios de la PDI y 18 Carabineros. El prefecto Guillermo Gálvez, jefe Nacional Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado subrogante, señaló que los funcionarios de la PDI quedaron en calidad de testigos y la institución abrió un sumario para indagar el caso de manera interna. Por su parte, el general de Carabineros Enrique Monrás señaló que también se realizará un sumario por los funcionarios de su institución.
La fiscalía Centro Norte estableció que el sujeto a cargo del lugar en Quilicura era Juan Pablo Ruiz Dupré, quien en 2016 fue detenido junto a otro sujeto por hacerse pasar por policías y “detener” supuestos delincuentes. Fue condenado en 2017 y cumplió una pena en libertad.
El prefecto Gálvez explicó que la investigación se extendió por casi 10 meses. El operativo se realizó el sábado, donde se efectuaron 10 órdenes de entrada y registro a domicilios y a dicho polígono.
Además, la PDI incautó una gran cantidad de armas: un fusil convencional, tres fusiles de airsoft; dos rifles convencionales; un rifle de airsoft; cuatro escopetas; 16 pistolas; una pistola de aire comprimido y una de airsoft; munición balística de diversos calibres; cargadores; cascos balísticos; chalecos antibalas; un dron; blancos de tiro; antiparras; y protectores balísticos, entre otras especies.