Prisión preventiva para “El Pocholo” por homicidio ocurrido en julio de 2024 en la población Santa Adriana
El Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH) del Ministerio Público consiguió la prisión preventiva de un sujeto conocido como “El Pocholo” que es sindicado como el responsable de un homicidio ocurrido en julio de 2024, en la población Santa Adriana de Lo Espejo.
Alrededor de las 14.00 horas del 19 de julio del año pasado un hombre chileno de 33 años, apodado “Kiwi”, caminaba por el Pasaje 50 de la población. Dos días antes había dejado la cárcel, luego de estar preso por robo y había vuelto al sector en donde acostumbraba deambular.
El sujeto no contaba con que un delincuente del sector de 24 años, por rencillas anteriores, lo atacara con un arma de fuego a plena luz del día y le diera tres balazos que le costaron la vida en el lugar.
La víctima recibió un impacto en la cabeza, en la zona costal izquierda, y otro en el glúteo izquierdo.
La Fiscalía ECOH le encargó la investigación a la Policía de Investigaciones (PDI) y gracias a testigos, registros de cámaras de seguridad y otras pericias, se pudo posicionar a “El Pocholo” en el sitio del suceso.
El imputado, con condenas por receptación y hurto simple y con cuatro órdenes de detención vigentes, mantiene tatuajes con símbolos orientales en sus brazos que coinciden con los del atacante que fue captado por cámaras de seguridad al momento del homicidio.
El fiscal ECOH, Pablo Sabaj, formalizó al sujeto por homicidio simple y porte ilegal de arma de fuego, y ante el mérito de los antecedentes el tribunal determinó su prisión preventiva y fijó un plazo de investigación de 180 días.
"Luego de varias diligencias investigativas, autopsia, un peritaje balístico, y por cierto, un peritaje a una cámara de seguridad que se encontraba en el lugar, se logró identificar al autor, quien fue formalizado el día de hoy por el delito de homicidio y quedó con la medida contra la inspección preventiva", indicó el fiscal.
Sabaj destacó que “uno de los elementos que permitió confirmar la identidad del autor es que las cámaras tuvieron la suficiente precisión para detectar el caso”.
“El imputado en uno de sus brazos tenía unos tatuajes tipo letras japonesas o algo parecido, y a través de redes sociales se pudo determinar que esta persona, quien era en ese momento un sospechoso, presentaba los mismos tatuajes que las imágenes que captaron las cámaras de seguridad, logrando entonces confirmar la identidad del autor", expuso el persecutor.
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