La Prueba de Selección Universitaria (PSU) se ha mantenido, en términos generales, sin mayores modificaciones en los 15 años que lleva aplicándose. Pero eso cambiará pronto, pues el Consejo de Rectores (Cruch), que tiene la tutela del sistema, evalúa aplicar cambios drásticos al examen.

Estas modificaciones están contenidas en un informe que elaboró un comité de expertos (seis nacionales y dos extranjeros), creado por el consejo a fines de 2017. Y en diciembre pasado, el equipo entregó sus conclusiones, a las que accedió La Tercera, y entre las que se cuentan la división de alguna de las pruebas y la incorporación de un examen escrito para el test de Lenguaje.

En concreto, el documento propone dividir la prueba de Matemática, para tener un examen de carácter básico, que sea obligatorio, y otro avanzado, que carácter opcional y exigible para carreras como las ingenierías.

En el caso del test de Ciencias, los expertos no llegaron a una conclusión de cambios específicos, pero sí entregaron algunas propuestas al Cruch, entre ellas dividir también el test en uno general obligatorio y otro de conocimientos disciplinarios específicos. Además, también se recomendó revisar la ponderación de puntajes de esas pruebas.

Pero la principal novedad está en la prueba de Lenguaje. Ahí, la comisión propuso incluir una prueba de escritura obligatoria, para evaluar el nivel de redacción de los jóvenes, lo que también serviría como una "señal" hacia el sistema educacional, pues con este cambio los colegios se verían obligados a reforzar el área de redacción de los escolares, materia que hoy presenta un nivel deficiente, según distintos exámenes aplicados en colegios.

Respecto de la prueba de Ciencias Sociales, los expertos no hicieron mayores indicaciones.

Menos contenidos

A nivel general, se plantea la necesidad de revisar la extensión de los contenidos que abordan las pruebas.

Este es un punto que anteriormente no ha encontrado consenso entre los expertos de educación, pues algunos consideran que la PSU debería reducir sus contenidos hasta los que se ven en 2° medio, con lo cual se perjudicaría menos a los escolares de liceos técnico-profesionales (pues los últimos dos años de la enseñanza media son para sus especialidades), pero otros creen que con ello se enviaría una "señal" negativa al sistema, ya que los colegios científico-humanistas dejarían de darles importancia a sus últimos dos años.

El Cruch se reunirá hoy para conocer en detalle estas propuestas y evaluar si es posible concretar alguna de forma inmediata, para el próximo proceso de admisión. Pero sea cual sea la decisión del consejo, los expertos que redactaron el informe plantean que los cambios se deben hacer de forma progresiva y sucesiva, de tal manera que no se generen tensiones en el sistema o falsas expectativas en los estudiantes de enseñanza media.

Además, los comisionados creen que es relevante que se definan los propósitos y usos de las pruebas, lo que debería contar con la validación de todos los actores educacionales, entre ellos el sistema escolar, las autoridades, el Cruch y el Demre de la U. de Chile.

Estos no serán los únicos cambios que podría aplicar el Cruch al sistema de admisión, pues también solicitarán informes para evaluar el desempeño y pertinencia de los otros instrumentos que usa el sistema de selección, como las notas de enseñanza media (NEM) y el ranking de notas, que refleja la "posición" que tiene cada estudiante en su contexto educativo.

Todos estos cambios, además, se dan en medio del diseño de un nuevo sistema de admisión, mandatado por la Ley de Educación Superior, y que deberá regir a partir de 2020. El futuro modelo contemplará dos subsistemas, uno para universidades y otro para institutos profesionales y centros de formación técnica, dirigidos por dos comités que tendrán a representantes de cada sector, y se considerarán programas especiales de acceso para "fomentar la equidad en el ingreso de estudiantes".

Los cambios

Lenguaje

En esta prueba, la comisión propuso incluir un examen escrito, para evaluar si los jóvenes pueden redactar siguiendo estructuras. Este sería uno de los cambios más grandes, pues actualmente la PSU es de alternativas.

Matemática

Los expertos proponen dividir este test en dos, para tener uno con contenidos generales, que sea obligatorio, y otro con contenidos específicos, que sea opcional, el que podría ser exigible en carreras como las ingenierías.

Ciencias

Los expertos entregaron algunas recomendaciones a evaluar, como reestructurar el test para tener uno general y otro específico, y revisar las ponderaciones de puntajes que tengan los exámenes.

Contenidos

También se plantea revisar la extensión de los contenidos incluidos en todas las pruebas, para priorizar los más importantes. Además, se recomienda concretar los cambios de forma progresiva y sucesiva.