Un grupo de diputados, liderado por Camila Rojas (Comunes), presentará este martes un proyecto de ley que obligará a los más de 11 mil colegios reconocidos por el Estado a replicar en sus aulas el proceso constituyente, a través de debates, talleres y cabildos entre los escolares, para así fomentar la participación de estos en la nueva Constitución.

La iniciativa mandata al Ministerio de Educación a entregar a los colegios las orientaciones, instructivos y recursos educativos para que puedan desarrollar estos espacios de reflexión, dentro de los planes de formación ciudadana que por ley deben tener los establecimientos.

También faculta al ministerio -no lo obliga- a recoger las actas y resultados de estas instancias de discusión, para “sistematizar dicho material y ponerlo a disposición de la convención constitucional, y publicándolo en su página web”.

La diputada Rojas explica que “el proyecto busca promover y fomentar la participación de los niños, niñas y adolescentes en el proceso constituyente, mediante el proceso escolar que viven”, y que “lo que nos interesa es que los niños, niñas y adolescentes no queden ausentes de este importante proceso que viviremos”.

El proyecto será respaldado por diputados opositores y oficialistas, entre estos últimos, Érika Olivera (RN).

La propuesta contó con la participación de la abogada Javiera Toro, una de las redactoras del Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución, quien explica que el objetivo del proyecto es justamente hacer más válida y participativa la creación de la nueva Carta Magna.

“Además, buscamos garantizar el derecho de niños, niñas y adolescentes a ser tomados en cuenta en asuntos que les afectan, derecho que el Estado chileno tiene la obligación de garantizar. No habría proceso constituyente sin la rebeldía de los adolescentes, por eso su voz debe ser tomada en cuenta en la convención constitucional”, dice.

El año pasado comenzó a ser implementada la asignatura de Educación Ciudadana, obligatoria para 3° y 4° medio, y que es parte de la última innovación curricular. Ahí se incorporan temas de teoría política y formación ética que apuntan a fortalecer el ejercicio democrático de los adolescentes.

Pero el plan de formación ciudadana también es para niveles menores, incluso de la educación parvularia, donde se desarrolla a través de juegos. En la enseñanza básica se reflexiona sobre principios de convivencia.