El Ministerio de Educación se encuentra preparando la logística para que 268 mil jóvenes rindan la Prueba de Transición, examen que reemplaza a la Prueba de Selección Universitaria (PSU). Y debido a la pandemia del coronavirus, en el plan de coordinación también participan las carteras de Salud, Interior y el Departamento de Evaluación, Medición y Registro (Demre), de la U. de Chile, los cuales integran una mesa de seguridad que seleccionará los locales y diseñará los protocolos sanitarios que regirán el 4 y 5 de enero de 2021, días en que se rendirá el test.

El subsecretario de Educación Superior, Juan Eduardo Vargas, explicó que este proceso implica “un tremendo desafío”, pues el objetivo es lograr que “todos los postulantes puedan rendir la prueba en las mejores condiciones posibles y respetando todas las exigencias sanitarias, en el contexto de la pandemia”.

La autoridad añadió que en julio pasado se convocó a la mesa de seguridad, donde trabajan más de 40 profesionales de diferentes reparticiones, para elaborar un plan multisectorial.

Vargas sostuvo que se han diseñado protocolos para afinar las medidas y, en paralelo, están en la fase de elección de los locales de rendición, como liceos, colegios o sedes universitarias.

Y ya hay algunas definiciones. Por ejemplo, que cada sala deberá tener un aforo reducido al 50% y ventilación natural. En la PSU del año pasado se requirieron 730 locales, pero ahora, eventualmente, el número podría ser más alto (la cifra aún no está zanjada), pues se busca tener más espacio.

“Debe haber un metro de distancia, ingresos diferidos de entrada y salida para evitar aglomeraciones, y sanitización permanente de los espacios utilizados para la rendición”, expresó Vargas.

Además, en este proceso participarán más de 26 mil colaboradores, entre jefes de local, examinadores y auxiliares, quienes serán capacitados para ejecutar sus tareas. En las sedes se entregarán kits sanitarios, que contendrán mascarillas y productos de limpieza.

Además, durante este periodo la mesa ha pedido mayor información a los establecimientos educacionales sobre los metros cuadrados disponibles, mapas de ingreso y salida y áreas alternativas para la aplicación del test, aunque luego del las protestas en la prueba del año pasado -explican en el Mineduc- Carabineros también evaluará los riesgos, lo que permitirá hacer la selección final de recintos.

También se diseñarán procedimientos para resguardar la custodia e higiene de las pruebas, la aplicación del test en comunas que estén en cuarentena y para aquellos que estén en aislamiento porque tienen Covid-19.

Los resultados de la Prueba de Transición, en tanto, serán entregados a inicios de febrero.

El proceso

Los rectores de universidades han monitoreado todo el proceso. Ennio Vivaldi, rector de la U. de Chile, afirmó que están trabajando junto a la cartera para “garantizar las condiciones de un proceso óptimo, tanto desde el punto de vista de su calidad educacional como de la seguridad sanitaria”.

Agregó que, tal como en años anteriores, se pondrá a disposición las instalaciones de la U. de Chile y de otros planteles que “cumplan con los estándares necesarios para ser lugares de rendición de la prueba”.

El rector de la U. de Talca, Álvaro Rojas, señaló que “es relevante garantizar la seguridad y el resguardo de la salud, tanto de las personas que rinden la Prueba de Transición como de todos los que participan desde el punto de vista logístico”.

Al igual que la U. de Chile, Rojas dijo que la casa de estudios ofreció sus sedes para el proceso.

El rector de la U. Mayor, Rubén Covarrubias, quien también es parte del comité de acceso al sistema universitario, agregó que se espera “lograr la cobertura mediante los establecimientos de enseñanza media, pero si en alguna región o localidad no se cubre (con los colegios), se va a recurrir a las universidades que están dispuestas a colaborar”.

Este año, además, es el primero de esta nueva Prueba de Transición, la que incluyó cambios: se definió la eliminación de un tercio de los contenidos que medía la PSU y disminuyeron las preguntas en los exámenes obligatorios, de 80 a 65. Y a raíz de la pandemia, el Ministerio de Educación y Demre hicieron un ajuste de los contenidos, para dejar solo los que son esenciales de cuarto medio. Así, las pruebas incorporan, principalmente, el currículum de primero a tercero medio.