Los hechos ocurridos en el colegio particular subvencionado de Puerto Montt recuerdan otros tiroteos en el mundo que tuvieron de protagonista a establecimientos educacionales. Conocidos han sido los ataques en Estados Unidos, y que el más recordado ocurrió hace ya 20 años.

El 20 de abril de 1999, dos estudiantes de último año de la escuela secundaria de Columbine, Eric Harris (18) y Dylan Klebold (17), abrieron fuego contra sus compañeros. En total, hubo 12 fallecidos y 25 heridos, entre profesores y estudiantes que se encontraban en el lugar. El plan que establecieron los agresores, que posteriormente se suicidaron, incluía armas obtenidas de manera ilítica, explosivos y cuchillos.

El segundo más masivo de la historia de Estados Unidos, luego del ocurrido en 1927 en la escuela Bath en Michigan donde fallecieron 28 personas, ocurrió en abril de 2007 en la Universidad Politécnica Virginia. Allí, un joven de 23 años, llamado Cho SeungHui protagonizó una matanza de 32 personas en 15 minutos. Luego se suicidó. Tras este ataque, el Congreso de dicho país legisló por primera vez sobre el control de armas.

Los hechos ocurridos un año después en la escuela primaria de Sandy Hook terminaron con 28 víctimas, incluyendo al perpetrador del ataque, Adam Lanza (20). El joven mató, a través de 150 balazos, a 20 menores entre seis y siete años.

Algo similar ocurrió en el Estado de Florida, en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas, donde 17 estudiantes y profesores fueron asesinados por Nikolás Cruz el 14 de febrero de 2018.

El último hecho que remeció al continente sucedió en Brasil. El 13 de marzo de este año, en Sao Paulo, Guilherme Taucci Monteiro, de 17 años, y Luiz Henrique de Castro, de 25, ingresaron a la escuela pública de Professor Raul Brasil de Suzano. Portaban un revólver calibre 38, una ballesta, un arco, flechas y artefactos que parecían explosivos. En el lugar asesinaron a ocho personas. Esta fue considerada la peor tragedia desde 2011.