Más de siete meses han pasado de la muerte de Diego Sebastián Albornoz Coronado, un joven de 23 años que el pasado 21 de febrero perdió la vida en un accidente ocurrido en el Cajón del Maipo, mientras practicaba bungee. Por su fallecimiento hay una persona formalizada y este miércoles el diputado Jorge Guzmán (Evópoli) acompañado de la madre del joven, Paola Coronado, presentó un proyecto de ley que busca -entre otras cosas- establecer sanciones a servicios de turismo aventura que no cumplan con estándares de calidad y protección.
Diego Albornoz apodado “El Chino” por sus cercanos, era oriundo de la ciudad de Talca, estudiaba Trabajo Social en la Universidad Católica del Maule y era parte del equipo de Rugby de la misma institución de educación superior.
Durante sus vacaciones de verano viajó junto a su familia a la Región Metropolitana, entre sus panoramas estaba visitar el Cajón del Maipo, sector conocido por la variedad de opciones de turismo aventura que ofrece.
Ese 21 de febrero, el joven se dispuso a saltar en bungee, una vez efectuado el salto al vació quedó suspendido en el aire por casi media hora, muriendo asfixiado. Según revelaron las investigaciones, el joven no habría recibido ayuda por parte del instructor a cargo de la atracción.
“Muchos especularon que a mi hijo le había dado un paro, que se había descompensado, muchas cosas, pero mi hijo, su causa de muerte fue por asfixia por compresión cervical externa. O sea, se asfixió”, señaló su madre desde el Congreso Nacional, asegurando que “su muerte fue un hecho por negligencia”.
Según explicó el fiscal Juan Cheuquiante, el instructor del deporte extremo carecía “de permisos para poder funcionar, como también no contando con los implementos necesarios para realizar dicha actividad. Luego de ello, la víctima se lanza y solicita ayuda a este instructor el cual no se la presta, produciéndose su fallecimiento”.
Por esta causa fue detenido precisamente el instructor del bungee, Francisco Gajardo, quien tras ser acusado por el Ministerio Público de homicidio simple, el tribunal decidió establecer su prisión preventiva.
Además, según las investigaciones de Fiscalía, Gajardo habría instalado de forma incorrecta el arnés del joven.
Para Paola Coronado, Gajardo “no es el único culpable, dado que este recinto tenía un dueño, y cuando salió el imputado salió con medidas cautelares”.
Tras la muerte de El Chino, su familia comenzó una campaña en junio para “hacer justicia”, según explicó Conrado. “Tras el accidente de mi hijo comenzamos a averiguar y nos encontramos con muchas falencias en las leyes, que si no hubiesen existido esas falencias mi hijo estaría con vida”, afirmó.
En ese contexto, el diputado Jorge Guzmán presentó el proyecto que -según explicó- busca “que el sello de calidad turística sea obligatorio para todos los operadores turísticos de Turismo Aventura en el país, y que además tengan que difundir este sello en lugares visibles para que sean los propios usuarios, las propias personas que concurran a hacer el Turismo Aventura quienes puedan verificar que el operador turístico cuenta con todos los permisos y condiciones de seguridad necesarias para garantizar la prestación de los servicios turísticos que se están otorgando”.
“Con esto buscamos dar un estándar de seguridad para que no vuelva a ocurrir ningún hecho como el que le ocurrió a Diego (…) que finalmente pierde la vida producto de un operador turístico totalmente negligente e irresponsable”, sostuvo.
El parlamentario aseguró que el proyecto ya fue ingresado y que fue “suscrito por gran mayoría de los parlamentarios que son parte de la Comisión de Economía de forma transversal”.
Además, informó que se reunió con el ministro de Economía, Nicolás Grau y con el Servicio Nacional de Turismo (Sernatur) quienes se habrían comprometido a aportar en el proyecto.
