Según dio cuenta el análisis "Radiografía de la pobreza en Chile. ¿Dónde están los más pobres entre los pobres?", dado a conocer esta mañana por el Hogar de Cristo, en el sistema chilenos de residencias integrales existe una cobertura para 390 personas en situación de calle.
Aquello se traduce en que la brecha de cobertura al 2018 es de 11.865, puesto que la población potencial, según los datos que se utilizan para este análisis, es de 12.255. Es así como la brecha representa un 96,8%, quedando sólo el 3,2% de las personas cubiertas.
Como dice el documento de 157 páginas, se entiende como residencias integrales a aquellas que "entregan alojamiento a las personas en situación de calle, además de apoyo psicosocial con la finalidad de entregar intervenciones integrales".
Para este análisis, el Hogar de Cristo utiliza los datos entregados por el Segundo Catastro de Personas en Situación de Calle (2011), el cual da cuenta de las 12.255 personas en situación de calle, de las cuales 84% son hombres y el 16% son mujeres.
Dicho informa, indica que si bien el promedio de edad es de 44 años, la población femenina es más joven que la población masculina, con un promedio de 7 años de diferencia. En cuanto a la distribución etaria, se identifica que los niños/as y adolescentes (de 0 a 18 años) son 742 (6% del total) y los adultos mayores (60 o más años) son 2.038 (17% del total).
En cuanto al promedio de permanencia en calle, se da cuenta de que este es de 5,8 años. El 23,9% lleva menos de 1 año; el 28,5% más de 1 año pero menos de 5; el 37,9% 5 o más años (MINDES, 2012).
Sobre las motivaciones que tendrían las personas para dar inicia a la situación de calle, en su mayoría, argumentan como razones problemas familiares, seguida por consumo de alcohol y problemas económicos.