La noche del 17 de noviembre, alrededor de las 22.00 horas, Jorge Contreras, entonces prefecto de Fuerzas Especiales de Carabineros de La Araucanía, recibió el llamado que puso término a su larga trayectoria en la institución.

En el marco de las medidas que Carabineros adoptó -en coordinación con el Ministerio del Interior- a propósito de las denuncias por obstrucción a la investigación por la muerte de Camilo Catrillanca, se desvinculó a Contreras de la institución. Esto, pese a que aseguró en su declaración ante el fiscal Jorge Calderara que no tendría responsabilidad respecto de los efectivos que protagonizaron el operativo que terminó con el joven comunero fallecido. 

Si bien en la misma instancia reconoció que fue parte de las diligencias realizadas esa tarde del 14 de noviembre, Contreras aseguró no conocer a los cuatro efectivos del GOPE que hoy se encuentran imputados. Además, señaló que no presenció el momento en que algunos de los efectivos dispararon y que no está a cargo del Grupo de Operaciones Policiales Especiales.

Por lo mismo, y siempre según el relato de su declaración judicial, recibió con sorpresa la llamada del Director Nacional de Personal, que se produjo luego de que el general Mauro Victoriano le había comunicado que dejaba el puesto como una "forma de descomprimir" la situación.

"Me informa (el general Haarmann) primero que me consideraba un gran oficial, pero que debido a los sucesos, y a la gravedad de los hechos, el general director había aceptado mi renuncia. Yo le pregunté inmediatamente porqué me desvinculan, si el personal del Gope no era de mi dependencia y él con sorpresa me pregunta que cómo que no dependía de mí. Ante lo cual le insistí en el punto, señalándome que lo iba a ver. Antes de terminar el llamado le pedí que lo reconsiderara, a nombre de mi familia, sin embargo nunca más volvió a llamar", relató.

La renuncia se pudo hacer efectiva de inmediato porque, cuando un oficial cumple 29 años y seis meses en la institución se procede a la firma de un documento donde consta la renuncia al organismo, quedando con fecha en blanco para hacerse efectiva cuando el mando lo decida. Contreras llevaba 31 años de servicio.

Consultado por este medio, el exprefecto prefirió guardar silencio. Sin embargo, sus cercanos aseguran que está dolido con la decisión y acusan a Carabineros de prescindir de sus funciones para responsabilizar a alguien de los hechos. "Se equivocaron de responsable", afirman en el entorno del exprefecto.

Incluso ha defendido en sus declaraciones que fue él quien dispuso el vehículo para que se trasladara a Catrillanca luego de recibir el disparo, y -como señala en su declaración- que no tuvo contacto con los funcionarios que hoy son investigados por obstrucción. Esto, ha dicho, a diferencia de quien se desempeñaba como jefe del Gope por esos días, Manuel Valdivieso, unidad a la que pertenecían Ávila, Alarcón, Valenzuela y Sepúlveda.

Pese a ello, Valdivieso fue trasladado a Talca, mientras que a Contreras se le aceptó la renuncia.

Su versión del procedimiento 

De acuerdo a la exposición de Contreras ante el fiscal, se enteró de lo que estaba sucediendo "cerca de las 16.18 horas a través de un mensaje vía Whastapp a un grupo "Canal estratégico Zacop", enviado por mi general Victoriano, que informaba de la existencia de un procedimiento por robo de tres vehículos. Cuando recibo este mensaje yo me comunico vía radial con Comando y Control de Malleco para informarme de lo sucedido y en dicha comunicación me entero de la efectividad del hecho. Me molesté porque esta comunicación se realizó únicamente por Comando y Control Malleco, no teniendo nosotros acceso a esos audios por realizarse en una frecuencia distinta. Fui yo el que realizó la comunicación radial por la frecuencia "central gama" que es la que usamos en Fuerzas Especiales, para informar del hecho, lo cual activó el protocolo".

Así Fuerzas Especiales habría comenzado a colaborar en el operativo que llevaba a cabo el Gope, incluyendo la salida de los helicópteros que detectaron los autos que habían sido robados. Como era costumbre, según relató en su declaración, él decidió constituirse en el lugar de los hechos, no donde se había registrado el robo, sino donde estaba el personal, en Temucuicui.

Contreras luego afirma que llegó hasta la zona de Montenegro, donde había un corte de ruta, pero en que, según expuso, "yo no escuché ni percibí que se nos estuviera disparando". En el intertanto que trabajaba en el despeje, "veo que cuatro funcionarios del Gope comienzan a avanzar a pie, por el mismo camino, dejando el vehículo en el que iban con conductor en el lugar, y los perdí de vista".

"Estando en esa dinámica escuché vía radial que personal del Gope informaba que más adelante había habido disparos y que también había un herido (...) Avanzamos cerca de 700 metros o un kilómetro hasta donde pude apreciar un tractor azul detenido a un costado de la ruta. Lo primero que veo fue a una persona herida en la cabeza y sobre el tractor solo sin nadie que lo acompañara. Yo me preocupé inmediatamente pues supuse la gravedad de lo sucedido, y quise abocarme a que se le diera atención a esta persona. Fue el teniente Aguilar quien subió al tractor y trató de estabilizar la herida", indicó en su testimonio. Contreras añadió que no vio que el individuo que había sido herido tuviera algún arma de fuego cerca de él.

Luego de que el herido fuera trasladado, Contreras conversó con uno de los imputados. "Me dirigí hasta un funcionario del Gope de apellido Alarcón, y le pregunto directamente que había pasado, diciéndome muy afectado que él había disparado, sin darme mayores explicaciones de cómo y a quién".

"Habrán trascurrido unos 10 o 15 minutos, llegó hasta el lugar el general Victoriano en compañía del mayor Valdivieso, jefe del Gope y no tengo seguridad de haber visto también al comandante Pincheira que es el jefe administrativo de zona. Al llegar el general Victoriano se entrevista conmigo y le informo de toda la situación y los hechos que yo había tomado conocimiento, desde lo vivido en la zona del tractor y también lo que pude conversar con el sargento Alarcón. Desde ese momento yo nunca tuve ninguna interacción con más con el personal del Gope", detalló.

Asimismo, agregó que "fue el general Victoriano quien comenzó las comunicaciones telefónicas con distintas autoridades institucionales y administrativas, informando de la situación desde el sitio del suceso".

Tras salir de la comunidad, los funcionarios y autoridades se dirigieron hasta la 2° Comisaría, de acuerdo al relato del ex jefe de FF.EE.

La reunión de los efectivos

"Yo fui uno de los últimos en llegar pues iba a bordo de uno de los vehículos sustraídos, me dirigí hasta mi oficina y pude ver que en un reservado que estaba al lado de mi oficina estaba reunido el General Victoriano, Comandante correa, el jefe del Gope, los pilotos de los helicópteros, entre otros. En un momento decidí bajar y me reuní con todos los funcionarios de carabineros que estaban ahí, tanto de FF.EE y del Gope, con la finalidad de informar del resultado del procedimiento", continúa su relato.

Nuevamente en su oficina, de acuerdo a su testimonio, le entregan el borrador de un informe ejecutivo que debían entregar al mando y que "se hace siempre cada vez que ocurre un procedimiento de importancia".

"Al leerlo me di cuenta que este contenía varios errores, tanto de redacción como en su contenido pues faltaban antecedentes que a mi juicio debían incorporarse. Por eso es que me aboqué a corregirlo. Respecto de la persona fallecida yo me quedé con lo que contenía el mismo borrador pues solo ellos sabían que había efectivamente pasado", subrayó, haciendo presente que el documento había sido visado por el general Victoriano, por el general Gallegos, y también revisado por un abogado que acompañaba al general Franzani, quien llegó hasta el lugar de manera urgente desde Santiago y se incorporó en horas de la noche.

El parte oficial de lo ocurrido, en tanto,  fue redactado, según su versión, en la unidad de Collipulli "y yo no participé de su redacción, por lo mismo en aquella parte que se me lee el documento en que se menciona la existencia de un enfrentamiento con terceros, quedando el tractor en la línea de fuego, señalé que yo mientras estuve en el sitio del suceso y hasta el momento de encontrarme con el tractor no aprecié (un enfrentamiento con terceros)".

En relación a las imágenes del procedimiento captadas por los efectivos de fuerzas especiales a su cargo, indicó en su declaración que "no las vi. Yo nunca di una instrucción en orden de borrar las tarjetas de las cámaras utilizadas ese día", sentencia, agregando más tarde que fue el día sábado que se entera, en el marco de la visita del general director Hermes Soto, que efectivos del Gope, contrario a lo que se había dicho, sí portaban cámaras, pero que las imágenes habían sido destruidas, "porque ahí el efectivo supuestamente mantenía imágenes intimas con su señora".