Esta mañana, el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, se refirió por segunda vez al caso de Polette Vega, estudiante de Trabajo Social de la Universidad de Chile que ha sufrido agresiones por un grupo de compañeros de una clase.

Las agresiones se remontan a julio, cuando un grupo de encapuchados la amedrentó y tironeó debido a que la joven es militante de Centro Derecha Universitaria (CDU). Una segunda agresión la vivió el pasado 24 de septiembre, cuando mientras asistía a clases un grupo de estudiantes le tiró agua intentando expulsarla de la sala.

Al respecto, el académico - que se encontraba participando en el cierre de una campaña de prevención de VIH de la universidad -  expresó que él "entendía perfectamente" la reacción de ella y "lamentaba infinitamente" lo que le había sucedido.

"Queremos garantizar que algo como eso no vuelta a ocurrir. En esta desgracia hay una toma de consciencia adicional y una mucho mejor comprensión de la comunidad de por qué tenemos que tomar medidas mucho más drásticas para impedir que haya violencia", indicó.

Sobre el ambiente en que se viven en la casa de estudios, afirmó que "la convivencia en la Universidad de Chile es muy buena", agregando que la agresión a la joven "no es un caso de convivencia, es un caso de violencia política, es un caso de bullying basado en política, y eso es gravísimo".

"Es un problema muy grave para nosotros y lo estamos abordando responsablemente", indicó el rector.

"Lo que uno ve en la universidad es un reflejo de lo que está ocurriendo en nuestra sociedad (...) Es muy lamentable que la política se haga con mucha violencia y con mucha descalificación, es un mal ejemplo para los jóvenes", agregó.

Sobre la universidad en sí, expresó que asociarla "con discriminación o intolerancia" es "una injusticia que no tiene nombre". A su parecer, indicó, la institución ha dado "un ejemplo en ese sentido".