Desde vigilancia aérea hasta policía especializada: las medidas por funeral de alto riesgo de hincha de la “U”

La Pintana, La Florida y Puente Alto están alerta. Este jueves debiese realizarse el funeral de Edson Olivares (25), más conocido como ‘Enzo Bombazul’, hincha de Universidad de Chile que fue víctima de homicidio luego de que en la noche del sábado sujetos desconocidos que lo seguían acribillaran con más de 65 balazos el automóvil en que se trasladaba.

De acuerdo a lo informado, al momento de su homicidio Olivares estaba siendo investigado por su probable vinculación con el asesinato de hinchas de Colo-Colo, así como por el robo de banderas y otros elemento pertenecientes a la barra de la Universidad Católica.

Tras esto, y luego de la entrega del cuerpo a su familia por parte del Servicio Médico Legal (SML) se reportaron lanzamientos de fuegos artificiales y constantes disparos en la antesala del velorio y posterior funeral de alto riesgo del asesinado barrista de la U.

Debido a los incidentes ocurridos durante los días de velorio, desde la Delegación Presidencial Metropolitana se decidió tomar medidas para garantizar la seguridad de la familia y de vecinos de La Pintana. “Hemos estado coordinando, monitoreando y hemos tenido un trabajo policial muy activo en orden a brindar seguridad a las personas de las comunidades aledañas”, indicó el delegado Gonzalo Durán.

Desde la delegación especificaron que las medidas tomadas son la disposición de servicios policiales de diferentes unidades de Carabineros hasta el días del funeral, el resguardo de establecimientos educacionales cercanos al velorio y la posibilidad del cierre de calles, si es que la situación así lo amerita

Por su parte, desde Carabineros indicaron que se ha realizado en servicio desde el martes 29 de octubre con tres turnos mientras se desarrolla el velorio, hasta la realización del funeral. “Están a cargo de un oficial jefe del grado de mayor con personal territorial y reforzado por especialidades COP, GOPE, OS-9, OS-7, SEBV, DRON, y RR.PP.”, señalaron desde la institución.

Añadieron que “existe planificación para poder intervenir cualquier acción o delito que ocurra dentro del sector, puede ser el lanzamiento de fuego de artificio o, como ya bien se conoce, o disparo injustificado en la vía pública”.

Junto con ello, la Municipalidad de La Pintana comentó que si bien es la delegación presidencial y Carabineros los encargados de los funerales de alto riesgo, como entidad están apoyando con vigilancia aérea.

Asimismo, el delegado Durán señaló que se intentó adelantar el funeral para este miércoles en el cementerio Parque El Prado, en Puente Alto. Sin embargo, las autoridades señalaron que por decisión de la familia se estaría realizando el jueves.

“Estamos disponiendo los servicios policiales destinados también a generar tranquilidad a los vecinos que circundan el lugar donde se va a realizar y por supuesto el trayecto del cortejo (...) El recorrido no incluye un paso por el Estadio Nacional y eso se va a coordinar con la familia en particular”, sostuvo la autoridad.

Respecto a los funerales de alto riesgo, este martes el Senado aprobó y despachó a la Cámara de Diputados -en tercer trámite- el proyecto de ley que regula su realización, tras ratificar por mayoría los cambios que hizo la Comisión de Seguridad Pública.

El proyecto de ley busca establecer un plazo máximo de 24 horas para la realización de un funeral considerado “de riesgo”, es decir, aquellos que permitan presumir fundadamente que su realización representa un riesgo para la seguridad y el orden público.

El grado de riesgo será establecido por Carabineros en dos horas tras el fallecimiento, luego deberá emitir un informe para la delegación presidencial, la que dará una resolución respectiva en base a los antecedentes. Dependiendo de ello, el cuerpo pasará directo del Servicio Médico Legal (SML) al cementerio, sin posibilidad de velorio.

Asimismo, el proyecto establece que se aplique el máximo de la pena existente a quien, en el contexto de estos funerales, incumpla normas como el uso de armas, de fuegos artificiales, consumo de alcohol y drogas, entre otros.