"En Las Condes y Vitacura, las autopistas y el Metro van bajo tierra. Si las cocheras de la Línea 7 se construyeran en Estoril (Las Condes), de seguro que estarían soterradas". Así de categórico es el alcalde de Renca, Claudio Castro, cuando se refiere a las negociaciones que ha sostenido con ejecutivos de Metro, para conseguir que los talleres que resguardarán los trenes de la futura Línea 7 se emplacen bajo tierra.

El proyecto de la nueva línea de la red, que unirá Renca con Vitacura para 2026, considera el emplazamiento de sus dos últimas estaciones en las intersecciones de Vicuña Mackenna con Brasil e Infante, en el sector poniente de Renca. Además, dispone la construcción de las cocheras en un terreno de 17,4 hectáreas, a un costado de la autopista Costanera Norte.

"Instalar las cocheras en la superficie traerá muchos efectos negativos. Actualmente, el área tiene poca consolidación urbana y mucho potencial para densificar con viviendas sociales y de integración (familias vulnerables y medias), áreas verdes, comercio y servicios, además de los proyectos inmobiliarios que de seguro llegarán gracias al Metro", dice Castro.

Y agrega: "No solo se trata de los ruidos molestos o los problemas de seguridad que se pueden generar con la instalación de un muro gigante que va a cercar el lugar. También nos quita la posibilidad de desarrollar proyectos urbanos públicos".

Externalidades negativas

Por otro lado, según lo informado por Metro, la construcción del túnel comenzará en Renca, a través de una máquina que excavará de forma subterránea. Por ello, se dispondrá de un área cercana de siete hectáreas, para levantar la fábrica de dovelas, grandes arcos de hormigón usados como revestimiento de los túneles

"Esta intervención se suma a un conjunto de grandes obras públicas que se instalan en Renca y producen una serie de externalidades negativas. Por ejemplo, la Costanera Norte nos quitó el acceso al río y la posibilidad de tener parques ahí", dice Castro.

Además de la autopista, también se emplazan tramos en superficie de la Ruta 5, General Velásquez y Américo Vespucio. También se proyecta parte del trazado del tren Santiago-Batuco y la construcción del Túnel Lo Ruiz, que uniría esta comuna con Quilicura, bajo el Parque Metropolitano Cerros de Renca.

Reuniones con Metro

Desde el municipio de Renca indican que se han reunido en al menos seis ocasiones con ejecutivos de Metro con esta solicitud. Consultado por La Tercera, acerca de este tema, el gerente de la División de Proyectos de Metro, Felipe Bravo, afirma que la respuesta es negativa.

"El proyecto de Línea 7, que ya se encuentra en fase de ingeniería básica, no tiene contemplada la construcción soterrada de sus cocheras, como ocurre prácticamente en todos los metros del mundo. La ubicación del taller debe cumplir el requisito de estar contiguo al trazado de la línea, por tanto se ha definido su ubicación en un terreno industrial que permite la realización de ese tipo de actividades y donde desarrollaremos un proyecto de alto estándar arquitectónico, constructivo y operacional", explica.

La exministra de Vivienda Paulina Saball, quien es hoy parte de un consejo asesor urbano de la comuna, opina que esta problemática "debe analizarse en términos de los costos que tendrá para las personas a nivel local". "Sabemos que en Santiago falta suelo urbano para proyectos habitacionales del Estado y este será un lugar privilegiado en términos de conectividad, por lo que aquí veo una oportunidad de construir con equidad urbana", añade Saball.

Desde otro punto de vista, el urbanista Iván Poduje cree que "es poco viable soterrar las cocheras, porque es carísimo y hoy ese sector es prácticamente agrícola e industrial". Y agrega que, en cambio, "se podría mejorar el entorno, construir un centro cívico comunal o una estación intermodal como la de Los Libertadores en Quilicura, pero con mejores accesos y asociados a servicios y comercio".