En la nube de esmog que afecta cada invierno a Santiago, el sector del transporte es protagonista: aporta un 41% del Material Particulado Fino (MP 2,5), la polución más fina y dañina para la salud de la población. Por ello, en noviembre pasado se publicó el "Plan de Descontaminación de la Región Metropolitana por MP 2,5", que incluye por primera vez la restricción de circular a los automóviles catalíticos fabricados antes de septiembre de 2011, lo que contempla la paralización de 340 mil vehículos cada día.
La ministra de Transportes, Gloria Hutt, explicó que la fiscalización se iniciará el 1 de mayo y se prolongará hasta el 31 de agosto de este año con un millón de vehículos afectos a la medida). "Habrá multas a los conductores que no cumplan", aclaró Hutt.
Añadió que la cartera tiene diseñado un programa de fiscalización enfocado en algunas zonas geográficas de la ciudad donde existe una mayor tecnología para monitorear. Así, se utilizarán las cámaras instaladas en las vías exclusivas, corredores y pistas "solo buses" del Transantiago. En esas arterias existen 343 cámaras activas en calles como Alameda, Providencia, Macul, San Diego, San Francisco, Santa Rosa e Irarrázaval, entre otras, aunque aún no está definido si todas ellas serán parte de este plan.
El sistema permite fotografiar las patentes y luego se asocian a una base de datos de los autos anteriores a 2011. En el futuro también se podrían sumar nuevas avenidas con este tipo de monitoreo, pues hay 157 nuevas unidades nuevas en Vespucio, Bilbao y Pajaritos.
La ministra Hutt añadió que se quiere ir ampliando "paulatinamente esta fiscalización a otras formas, lo que está siendo estudiado en este momento". Esto, pues la restricción rige en 37 comunas del Gran Santiago, además de San Bernardo y Puente Alto.
Información
La fiscalización de manera gradual en algunas arterias de la capital genera debate entre los expertos. Alberto Escobar, gerente de estudios del Automóvil Club de Chile, sostuvo que cuando hay medidas "escalonadas" es una mala señal. Esto fue estudiado, aprobado y debe ser sancionado desde este año". Añadió que el mercado y los usuarios ya recambiaron los automóviles para no resultar afectados, "entonces las personas están preparadas". Además, añadió que si la restricción comienza con un plan piloto debería realizarse una campaña informativa en detalle "para que no haya confusión".
En el sector ambiental apoyaron que la norma rija de manera paulatina. Ernesto Gramsch, investigador en el área ambiental de la U. de Santiago, aseguró que "ninguna medida funciona si se aplica de una sola vez. Es importante que se realice por etapas y que finalmente se ponga en marcha el próximo año". Recordó la relevancia de que se controle la carga de emisiones provenientes de las fuentes móviles: automóviles, camiones y motocicletas producen el 40% de la contaminación de cada invierno.
