Siete días después de que la exsubsecretaria de Vivienda, Tatiana Rojas (RD), entregara su declaración ante la PDI en que reconocía que le informó al ministro de la cartera, Carlos Montes (PS), sobre lo sucedido con Democracia Viva y los convenios con la Seremi de Vivienda de Antofagasta, la Fiscalía le encargó a la policía tomarle declaración al entonces jefe de Asentamientos Precarios, Ricardo Trincado.
Trincado fue hasta el 4 de diciembre jefe del departamento encargado de los programas habitacionales del ministerio. Si bien en el Minvu descartan su condición de “asesor” de Montes, sí era un hombre de su total confianza.
Fue en enero del 2023 que Trincado ingresó al ministerio para llevar adelante la materia habitacional en las zonas más vulnerables del país. Así, al menos, lo explicó ante la PDI, en su declaración como testigo, donde blindó al ministro Montes y entregó una contradictoria versión sobre cómo se enteró del caso Democracia Viva.
El 20 de enero, Trincado entregó su versión a los detectives: “el viernes 19 de mayo del 2023 recibí un correoelectrónico de la subsecretaria de la época Tatiana Rojas Leiva, el cual indicaba respecto a mi persona, un encargo para estudiar una denuncia relacionada con el programa de asentamientos precarios en Antofagasta. El correo enviado incluía la denuncia del equipo de asentamientos precarios y una respuesta del Seremi Carlos Contreras respecto del mismo asunto. Acto seguido, solicité a Carlos Contreras enviara la auditoria referida en sus descargos sobre los hechos denunciados, la cual me remitió el 30 de mayo”.
No fue hasta el 5 de junio que Trincado evacuó un informe, tras analizar cargos y descargos de las partes. Este documento se lo envió a Tatiana Rojas.
“Contenía un informe con conclusiones, recomendaciones y medidas para enfrentar algunos aspectos de la denuncia, que decía relación con tres temas, maltrato laboral, dos contratación de personal en la SEREMI con cargo al programa de asentamientos precarios y tercero que el Seremi Carlos Contreras, tenía vínculos políticos con quienes estaba contratando. Además del pago de un arriendo excesivo a una fundación de nombre Procultura según recuerdo. Hago presente que, lo que se me encargó fue un informe no una investigación o sumario”, indicó.
Por lo mismo, dijo, “asumí que para el desarrollo del informe enviado a la Tatiana Rojas la documentación recibida era de buena fe de toda las partes”.
La contradicción
En ese informe, Trincado se metía de lleno en el análisis de la denuncia, incluso, en el documento que firmó decía que lo que se denuncia son “eventuales incumplimientos administrativos: autorización de pago de arriendo a la Fundación ProCultura, falta de participación de Serviu y Encargada Regional del Programa Asentamientos Precarios respecto de autorización de presupuestos, falta de aprobación de Serviu de presupuestos, en particular el de ProCultura, excesiva cantidad de profesionales contratados en la Seremi, existencia de profesionales desde el mes de enero de 2023 sin contrato de trabajo y eventuales conflictos de interés en elaboración de convenio con Fundación Democracia Viva”.
A pesar de lo señalado en el informe, y ser consultado sobre los detectives, Trincado dijo que no se había enterado de lo relacionado a la fundación de Daniel Andrade, pareja de la diputada Catalina Pérez.
Ante los detectives señaló que “respecto a su nueva pregunta, tuve conocimiento de la situación de Democracia Viva una vez que el caso se conoció públicamente. En cuanto a la denuncia de vínculos politicos le sugerí a la subsecretaria en el informe que se encargue una indagatoria sobre ese punto al área jurídica del ministerio en Antofagasta”.
Sobre el ministro Montes, lo sacó de cualquier conversación. “No recibí consultas de otras autoridades diferentes Ministerio respecto de los hecho expuestos en la presente”, es decir, sólo dijo mantener comunicación con la exsubsecretaria, pues “una vez entregado mi informe a Tatiana Rojas, me desprendí del tema”.
