Este lunes, cinco afectados por el megaincendio de la Región de Valparaíso del 2 y 3 de febrero de 2024, el que dejó 137 fallecidos y alrededor de 16 mil damnificados, dieron inicio a una huelga de hambre.

La medida de presión de vecinos de Villa Independencia de Viña del Mar se debe al lento proceso de reconstrucción a un año de la tragedia, cuyos avances, de acuerdo al gobierno, alcanzan un 26%.

Los afectados, además acusan recortes en los beneficios y la exclusión de algunos damnificados para una solución habitacional.

Esta tarde, la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti (FA), envió una carta al delegado presidencial de la Región de Valparaíso, Yanino Riquelme, solicitando creación de canales de diálogo entre el gobierno y los manifestantes.

En la carta, Ripamonti entrega los antecedentes generales de la huelga, afirmando que además de las cinco personas que se encuentran realizando la medida de presión hay otros 50 vecinos que los acompañan.

Sobre el petitorio, la autoridad comunal afirma en el documento que no cuentan con información formal. No obstante, sostiene que “hemos tomado conocimiento de que sus planteamientos estarían relacionados con necesidades y solicitudes vinculadas a las capacidades de los distintos niveles de gobierno, en particular, la falta de certezas en los plazos de reconstrucción, incertidumbre respecto de la continuidad de los bonos otorgados, falta de información y/o indeterminación de personas hábiles e inhábiles para optar a subsidios con motivo de la emergencia, entre otras cuestiones relacionadas con el megaincendio”.

“Entendiendo el rol que su autoridad ejerce en la coordinación de los servicios y carteras regionales, consideramos oportuno compartir estos antecedentes y solicitar que se puedan evaluar instancias de diálogo que permitan canalizar adecuadamente las inquietudes de los manifestantes, con el fin de evitar que esta situación derive en afectaciones para la salud de los involucrados”, continúa la carta.