Roban celular a premio Nobel de Física Serge Haroche en pleno centro de Santiago

El físico cuántico francés Serge Haroche (80), ganador del premio Nobel de su campo en 2012, sufrió este lunes el robo de su teléfono celular en pleno centro de Santiago.

El científico, quien se encuentra en el país participando del Congreso Futuro, fue abordado por un solitario delincuente pasadas las 13 horas en la intersección de la Alameda con Portugal, tras salir de un conversatorio en la sede central de la Pontificia Universidad Católica (PUC).

Según se conoció, Haroche se dirigía a su hotel cuando sacó el aparato móvil, avaluado en cerca de un millón de pesos, para consultar la ubicación del recinto a través del sistema de GPS. Fue en ese momento cuando el antisocial -que vestía ropa oscura- le quitó el dispositivo de manera sorpresiva, para luego darse a la fuga atravesando la Alameda para luego perderse de vista en dirección al norte.

El laureado físico, que no resultó lesionado, interpuso la denuncia en la Primera Comisaría de Carabineros.

Serge Haroche (80) es un físico cuántico francés que ha dedicado su carrera ha estudiar los fenómenos más impredecibles de la luz y la materia que ocurren a la mínima escala conocida hasta ahora.

Cuando se trata de los componentes más pequeños de nuestro universo, nuestra comprensión habitual de cómo funciona el mundo deja de aplicarse. Entramos al intrigante y contraintuitivo reino de la cuántica. Durante mucho tiempo, los comportamientos cuánticos solo podían examinarse teóricamente, pero a partir de la década de 1980 Haroche diseñó ingeniosos experimentos para estudiar los fenómenos cuánticos en los que interactúan la materia y la luz.

Junto al físico estadounidense, David Wineland, trabajaron de forma independiente, pero complementaria, para atrapar y manipular partículas cuánticas únicas: átomos y fotones. Mientras Wineland logró atrapar partículas de materia mediante partículas de luz, Haroche hizo todo lo contrario: atrapó partículas de luz y las estudió gracias al empleo de partículas de materia. Esta brillante y revolucionaria acción conjunta les hizo merecedor a ambos del Premio Nobel de Física en 2012.