El lunes no pasó desapercibido entre autoridades de gobierno el balance sobre el primer día de la rendición de la PSU. Esto, porque el punto de prensa realizado en La Moneda no estuvo encabezado por la ministra de Educación, Marcela Cubillos, ni por su par de Interior, Gonzalo Blumel. En sus lugares estuvieron los subsecretario de Educación, Juan Eduardo Vargas, y de Interior, Juan Francisco Galli.
La vocería había sido tema de debate en una reunión que previamente había encabezado el Presidente Sebastián Piñera, instancia en la que también participó Cubillos y ministros del comité político.
En la cita se debatió sobre la conveniencia o no de la intervención del Mineduc en la materia y, según fuentes de gobierno, Piñera sostuvo que era necesario que Cubillos, como en otras oportunidades, entrara en la escena pública con su tradicional "estilo frontal". Sin embargo, de acuerdo a las mismas fuentes, la ministra le hizo ver al Mandatario que su aparición podría terminar polarizando el ambiente y generar un efecto adverso.
El punto planteado por Cubillos, quien hizo hincapié en que el Mineduc no tiene atribuciones respecto del procedimiento del examen, fue recogido por Piñera. Así, se acordó que lo mejor era esperar que concluyera el proceso y ahí se realizara un balance, que fue lo que terminó ocurriendo ayer pasada las 18 horas (ver pág 3).
Sin embargo, los senadores de oposición señalaron que Cubillos debe asumir su responsabilidad: "Cuando hoy la ministra se lava las manos responsabilizando al Consejo de Rectores, le quiero recordar que es ella la que preside el Crunch", dijo Yasna Provoste, quien condenó la violencia ocurrida ayer.
Pese a eso, hay quienes en el gobierno transmitían que Cubillos debió estar en la primera línea desde el inicio del proceso, debido a que recalcan que la prueba es relevante a nivel educacional y la titular de la cartera "no puede mantenerse al margen". Sin embargo, en el Mineduc defienden "la estrategia" empleada, debido a que la oposición terminó criticando a los manifestantes que impidieron la correcta realización de la prueba y no concentraron sus críticas en ella, de quien, dicen, cuando lidera un tema tiende a "concentrarlo" en su figura y a recibir los costos.
Interior y la seguridad
El rol de Blumel también ha concentrado el foco de atención de la oposición y en el oficialismo e, incluso, al interior del gobierno. Esto, porque creen que el jefe de gabinete debería tener una postura "más firme" para enfrentar el orden público y defender el trabajo que realiza Carabineros. De hecho, durante el fin de semana en Chile Vamos le pidieron que concentrara sus esfuerzos en esa materia.
Asimismo, en el Ejecutivo hay quienes recalcan que Blumel insiste en plantear que "el orden público es responsabilidad de todos", lo que consideran como un "error", debido a que él es el ministro a cargo de la seguridad y orden público y que, por lo tanto, debe empoderarse en ese rol.
De hecho, en privado son varios quienes apuntaban a que hubo "una debilidad" en Interior para resguardar la seguridad de la PSU, debido a que se sabían con mucha anticipación las intenciones de boicotear el proceso. Este cuestionamiento es refutado en Interior, señalando que se pusieron a disposición del Demre y del Cruch desde el día uno y comenzaron hace semanas a elaborar la estrategia junto a Carabineros para proteger los establecimientos. Sin embargo, recalcan que hubo resistencia del Demre para que existiera resguardo policial en los perímetros y al interior de los establecimientos, lo que, recalcan, dificultó resguardar el éxito del proceso.
En medio de los cuestionamientos, ayer el ministro Blumel junto a Galli salieron a realizar, pasadas las 19.00, un punto de prensa mostrando una postura "más firme" del gobierno frente a los hechos. Anunciaron un conjunto de acciones legales y condenaron que el proceso no se haya podido realizar con normalidad.
Consultado sobre la responsabilidad del gobierno en el tema, el ministro no hizo una autocrítica: "Quiero ser muy claro en esto: la responsabilidad de los problemas causados en la PSU es de todas aquellas personas y de todos aquellos grupos que por la fuerza buscaron interrumpir o hacer fracasar. No nos confundamos, aquí hubo un esfuerzo muy importante de las instituciones responsables, con la colaboración de Carabineros".