Al parecer el período de discernimiento terminó para el sacerdote Hans Kast, quien a mediados de septiembre entregó una carta al Arzobispado para dejar la parroquia San Pedro de Las Condes. Así, en el día de ayer, dejó su servicio pastoral en el lugar y además, presentó una misiva pidiendo la dispensa de las obligaciones del ministerio sacerdotal.

De este modo, el religioso emblemático dentro del caso Karadima da un paso al costado.

El hermano mayor de José Antonio Kast, fue el primer sacerdote que denunció al expárroco de El Bosque, en 2010 y 2011. Él comunicó al arzobispado, y luego lo ratificó ante el fiscal Xavier Armendáriz, testimonios de abusos, pidió reuniones, solicitó abrir investigaciones previas y tomar medidas pastorales, también en el caso Laplagne. Pero nada de eso se hizo efectivo.

En el caso de Kast, después de Karadima efectuó otras denuncias y advertencias de posibles abusos, por ejemplo respecto del presbítero Jorge Laplagne, caso por el cual le escribió al entonces arzobispo, el cardenal Ricardo Ezzati.