Uno de los grandes anuncios de la cuenta pública del Presidente Sebastián Piñera fue la intervención de 33 barrios en todo Chile, que presentan más problemas delictuales y sociales. Estos barrios agrupan el 25 % de los delitos nacionales y para disminuir esta cifra el programa ya delineó las líneas de acción.

Lo primero es la "intervención policial". Según una minuta del gobierno, "Carabineros realizará constantes rondas preventivas a fin de evitar delitos en estos sectores", donde la inyección de recursos humanos para las dotaciones de la policía uniformada en estas zonas será fundamental, y para eso, los 3.300 carabineros que fueron liberados de labores administrativas será fundamental, pues serán integrados a labores operativas en los barrios críticos.

Será la Subsecretaría de Prevención del Delito la encargada de llevar adelante este plan en coordinación con las 33 municipalidades que serán parte del plan. En ese sentido, según explicaron, la intervención también incorporará la iluminación de calles y las áreas verdes.

En este ítem también la PDI jugará un rol. La misma minuta del Ejecutivo señala que "la Policía de Investigaciones trabajará por medio de su Departamento de Acción Comunitaria (Dacom), conformado por detectives con perfiles especiales, como sociólogos, psicólogos y trabajadores sociales. La PDI se integra a la comunidad y trabaja con los vecinos para ir generando redes de confianza, dándoles seguridad, pero también recabando información que permita desbaratar bandas delictuales y así ir mejorando la condición de seguridad de esos mismos vecinos".

Para determinar la "criticidad" de cada barrio, el Ejecutivo tomó tres indicadores de cada barrio: vulnerabilidad social, riesgo de las personas y riesgo de criminal. Con estos datos se creo un índice con un determinado número. Dentro de las 10 comunas con el índice de "criticidad" más alto están: Quilicura, San Bernardo, La Pintana, Antofagasta, Maipú, Puente Alto, Rancagua, Alto Hospicio y Huechuraba. En el caso de La Pintana es la única comuna que cuenta con dos barrios críticos: las poblaciones El Castillo y Santo Tomás.

La alcaldesa de la comuna, Claudia Pizarro, explicó a La Tercera que "este problema no es solo de Carabineros y la PDI, quienes trabajan con sus recursos humanos en un 200%.  Tampoco es un tema de implementar 'Elige vivir sin drogas' y el plan integral para menores. Esto no quiere decir que estos programas no sean buenos, pero tampoco lo son todo lo que se necesita. Acá falta la presencia del Estado en inversión pública en su conjunto".

Según la jefa comunal, en 35 años no se ha hecho una inversión potente en la comuna. "En estas zonas la vida es oscura, donde la droga es la vía de escape, por lo tanto, hay que entregar otro camino, con luminarias, espacios públicos, vida urbana. Mejorar la calidad de vida, llegar donde la droga no puede".

Plan social

Otro de los enfoques del programa de intervención de los 33 barrios es el "aumento de la presencia del Estado". Según explican desde el gobierno, se trabajará de forma coordinada con los vecinos con el objetivo de reducir la segregación de estos barrios. Para eso se aumentará los planes comunales en cuanto a educación, salud, cultura, vivienda y deporte.  "Se instalará la oferta programática del Estado. Ejemplos: Elige Vivir sin drogas o el Sistema Lazos a través de su componente Terapia Multisistémica, de reinserción y rehabilitación de niños, niñas y adolescentes de alto riesgo", dice la minuta del Ejecutivo.

Antofagasta es la única ciudad de regiones que cuenta con uno de los barrios más críticos dentro del listado de las 10 zonas que lideran el "ranking" de "criticidad". Acá, según explicaron desde el municipio, es el robo de autos el delito que más preocupa, dado que generalmente los vehículos son pasados ilegalmente a Perú y Bolivia para la venta clandestina.

La intervención, para su alcaldesa Karen Rojo, es una buena medida. "Hemos solicitado prioridad en materia de seguridad, pero con  medidas concretas. Este plan ayudará además disminuir la sensación de inseguridad, ya que contaremos con cámaras de reconocimiento facial y otras herramientas tecnológicas que antes no estaban en regiones, solo estaban en Santiago", señaló la edil.

Por ahora, la Subsecretaría de Prevención del Delito sigue trabajando en los delineamientos del plan, el cual, según esperan algunas municipalidades, sea concretado en el corto y mediano plazo, para que pueda ser algo que perdure en el tiempo.