La Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) formuló cargos contra el Sanatorio Alemán, Gas Sur y la constructora ISD, por su presunta responsabilidad en la explosión que costó la vida de tres trabajadores, el pasado 21 de abril.
Según la investigación que desarrolló la SEC, la fuga fue originada por una perforación a la red de gas natural que se ubica al interior de la clínica, en medio de los trabajos de mejoramiento de infraestructura que realizaban los dos obreros fallecidos. Sin embargo, la conclusión del organismo es que existen diversas responsabilidades de las tres empresas involucradas.
En el caso del Sanatorio Alemán, la indagatoria de la SEC comprobó que el recinto contaba con instalaciones de gas no declaradas ante la superintendencia.
En tanto, los cargos contra la constructora ISD responden a no haber adoptado las medidas de seguridad necesarias para reducir los riesgos al intervenir el recinto y realizar trabajos en áreas donde existen instalaciones de gas. A su vez, la empresa Gas Sur no habría supervisado la tubería de gas que existe en el sector.
Según explicó el superintendente de la SEC, Luis Ávila Bravo, en este hecho no se adoptaron "las medidas de seguridad necesarias para evitar la explosión, como por ejemplo, acciones que pudieran minimizar los riegos tras la alteración del entorno que se produjeron en ese sector". Agregó que "aquí hay un factor clave que nace nítidamente de nuestra investigación, el actuar correcto de los actores coordinados adecuadamente habrían hecho este accidente absolutamente evitable".
A partir de la notificación, las empresas tienen 15 días de plazo para entregar sus descargos, antes de que se defina la aplicación de multas.
