Restaurantes de comida rápida, menús chinos y sushi, lideran la lista de los locales que fueron clausurados el año pasado por la Seremi de Salud, luego que las fiscalizaciones realizadas detectaran condiciones sanitarias deficientes y que ponen en riesgo a los clientes.

Se trata de revisiones que realiza la autoridad sanitaria de manera sorpresiva o tras la ocurrencia de intoxicaciones. Así, el año pasado fueron 98 los locales que quedaron con prohibición de funcionar. ¿Los principales motivos? Presencia de plagas y condiciones deficientes de elaboración y manejo de los alimentos.

"La Seremi de Salud Metropolitana realiza fiscalizaciones por vigilancia, denuncia, brotes de intoxicación alimentaria y también cuando se abre un nuevo negocio de alimentos", explica la seremi Rosa Oyarce, quien añade que estas revisiones son integrales y buscan certificar que existan correctas condiciones sanitarias, de higiene y seguridad, por lo que se revisa "desde la infraestructura del lugar a la bodega de alimentos, con su procedencia y fechas, almacenamiento de productos, control de temperaturas de refrigeradores y presencia de plagas", entre otras materias.

Carlos Valenzuela, gastroenterólogo de Clínica Biobío, explica que el principal riesgo de una mala manipulación de productos en una cocina está en adquirir infecciones, "los alimentos no son estériles y al estar en un ambiente con malas condiciones pueden proliferar bacterias, generando casos de gastroenteritis e intoxicaciones". Valenzuela agrega que, en general, los locales de comida en Chile tienen un buen estándar comparado a otros países menos desarrollados, pero que, aún así, las intoxicaciones por alimentos son bastante comunes: "las estadísticas del Ministerio de Salud indican que el 4% de las consultas de urgencia son por gastroenteritis aguda, que en niños y adultos mayores pueden ser muy severas".

Javier Tinoco, infectólogo de Clínica Universidad de los Andes, plantea que, para evitar errores comunes y posibles daños en la salud de las personas, "en las cocinas se deben tener separados los alimentos crudos y los cocidos. También, los almacenamientos no deben estar cerca del suelo, la cocina debe mantener un buen aseo, buena iluminación y contar con un registro de alimentos y una conservación a temperatura apropiada".

En 2018, en tanto, la seremi de salud clausuró 94 restaurantes en Santiago, mientras que en 2017 fueron 96.