Este lunes, el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) informó que ofició a las reconocidas cadenas de peluquería Palumbo y Glam&Co, en respuesta a una serie de denuncias de consumidores que indicaron que se les solicitó propinas al momento del pago, lo que podría infringir la normativa vigente.

Al respecto el organismo informó que ha recibido una decena de reclamos relacionados con estas peluquerías y otras empresas del rubro, en las que se ha detectado la solicitud de un cobro adicional durante el proceso de pago.

Reclamos

Entre las denuncias recibidas, Sernac dio a conocer algunas en que incluían propinas por los servicios brindados por los trabajadores de los recintos de belleza.

“Mi mamá es adulta mayor y no se maneja con la tecnología por eso el reclamo lo pongo yo (...) luego de atenderse le llevaron la máquina para cobrarle el total, que incluso llevaba propina incluida casi obligada. Al salir del local nos dimos cuenta que las pestañas estaban lisas, lo que se hizo no funcionó, y no quieren devolver el dinero”, señala una de ellas.

Sernac ofició a dos peluquerías por pedir propinas.

En el mismo contexto, otro cliente acusó que “me piden propina cada vez que voy a ese lugar, muchas veces te dicen hay descuentos y luego igualmente te piden propinas para las manicuristas, asistentes (masajistas y lavadoras de pelo) (...) los valores de sus servicios son altos ya que por todo te cobran”.

Desde el servicio remarcaron que, en peluquerías, barberías y centros de estética, como es el caso de Palumbo y Glam&Co, no corresponde establecer ni sugerir un porcentaje específico de propina, aunque como en cualquier servicio las y los consumidores podrían eventualmente dejar una propina de manera espontánea, por lo que no puede ser solicitada o sugerida por el personal de ventas o cajeros.

A la vez, se informó que “este tipo de prácticas no sólo generan confusión entre los usuarios, sino que además contravienen lo establecido en la Ley del Consumidor (LPC)”.

El director nacional del Sernac, Andrés Herrera, recordó qué “las propinas en Chile siempre son voluntarias, incluso en el rubro que está habilitado para sugerir el 10% en la cuenta. En el caso de barberías o peluquerías no se justifica ni es prudente que se solicite predeterminadamente un 10% de propina, puesto que el servicio además de no estar dentro de la hipótesis de la ley, ya debe considerar en la tarifa el costo total del servicio”.

Por último, agregó que “los costos del servicio deben ser acordes para poder proporcionar un salario digno a las y los trabajadores, y en ningún caso las propinas deben considerarse como parte del sueldo ofrecido por el empleador, en este ni en ningún otro rubro”.