Servicio Nacional de Migraciones informa que comunidad venezolana podrá salir del país con documentos vencidos

Desde el lunes 29 de julio, la embajada de Venezuela en Chile suspendió sus funciones indefinidamente, luego de que el Presidente Gabriel Boric no reconociera la proclamación de Nicolás Maduro tras los cuestionamientos de legitimad a los resultados de las elecciones. Considerando la problemática que generó en la población migrante, el Servicio Nacional de Migraciones flexibilizó los requisitos para salir del país.

En aquella oportunidad, el gobierno de Venezuela informó que ningún trámite será procesado, con excepción de los documentos emitidos hasta el 25 de julio, los cuales será enviados mediante una empresa de transportes.

Tras esta determinación, decenas de migrantes venezolanos avecinados en Chile se agolparon en la embajada ubicada en Providencia para exigir la tramitación de sus pasaportes, permisos, citas de visa, entre otros.

Ante este escenario, Migraciones informó que la comunidad venezolana –independiente de su situación migratoria– está autorizada a salir del territorio nacional con documento de identidad o pasaporte vencido.

Mediante una publicación de X, el canciller de Venezuela, Iván Gil, manifestó: “Rechazo ante las acciones injerencistas de un grupo de gobiernos de derecha, subordinados a Washington y comprometidos abiertamente con los más sórdidos postulados ideológicos del fascismo internacional, tratando de reeditar el fracasado y derrotado Grupo de Lima, que pretenden desconocer los resultados electorales de los Comicios Presidenciales efectuados este domingo 28 de julio, los cuales dieron la victoria como presidente de la República Bolivariana de Venezuela a Nicolás Maduro”.

En la misma declaratoria, comunicó la decisión de retirar a todo el personal diplomático de Chile, además de los representantes de Argentina, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay.

Todas naciones que cuestionaron los resultados de los comicios y llamaron al Consejo Nacional Electoral a transparentar las actas oficiales, acción que a tres días de las presidenciales todavía no sucede.