Esta tarde, el Servicio Médico Legal (SML) de Valparaíso entregó los cuerpos de los 6 fallecidos por la caída de un helicóptero el 25 de marzo en Colliguay: David Sánchez, Alfredo Salazar, Marco Antonio Beltrán, Christian Cid, Mario Marchant y Claudio Miranda.

La directora del servicio, Diana Aparicio, reconoció la dificultad del proceso de identificación de los cuerpos y detalló que, en coordinación con la Fiscalía regional, se realizaron "autopsias, análisis genéticos y odontológicos". Luego indicó a la prensa que esta sería su última declaración, pues hoy le habrían pedido renunciar a su cargo.

Afuera del SML se encontraba Cristian Guerra Campos, hermano de Claudio Miranda Campos, quien dijo a La Tercera que "entiendo que hay una investigación, pero no ha habido ninguna explicación. Imagínate que la persona que nos atendió, en el SML, nos preguntó qué había pasado".

Asimismo, criticó a la empresa EcoCopter, a la que trataron de contactar pero que "no se pronunció. Nadie nos ha dicho las cosas claras". Guerra solo rescata que Francisco Subiabre, uno de los representantes de la empresa de seguridad que empleaba a su hermano, visitó a la familia la noche del accidente.

Por su parte, Juan Carlos Contreras, quien trabajó hasta la semana del 15 de marzo en el proyecto de transmisión eléctrica LT Cardones Polpaico, señaló a este diario que "el piloto que falleció era demasiado avezado en las maniobras. Eran vuelos rápidos, no suaves ni controlados".

El exuniformado también destacó que el helicóptero que los transportaba mantenía adherido, a un costado, un canastillo con materiales de construcción o alimentos, dependiendo del viaje.

Contreras además se refirió al trabajo que desempeñaban en el fundo La Providencia. "Le dábamos seguridad a los trabajadores por los comuneros, que se oponían al proyecto. (Ellos) tenían miedo, no querían seguir trabajando, por eso la empresa recurre a excomandos de infante de Marina".

Los funerales de los 4 exuniformados se realizarán mañana en Viña del Mar y Concón.