Ayer miércoles, la Comisión de Salud del Senado acordó de forma unánime solicitar al gobierno que declare alerta sanitaria por cáncer debido a los atrasos que existen en el acceso a tratamientos oportunos y adecuados para quienes padecen esta enfermedad. De no adoptarse esta medida, informaron, no apoyarán ninguna partida presupuestaria de salud.
Esta jornada, la situación fue abordada por la subsecretaria de Salud Pública, Andrea Albagli, quien durante una actividad de la cartera fue consultada sobre la materia y la factibilidad de que esto finalmente se concrete. Al respecto, la autoridad expresó que si bien desde el gobierno compartían la preocupación ya que el cáncer es una enfermedad importante que afecta a la población de nuestro país, el declarar una alerta sanitaria por esta enfermedad no resolverá los problemas asociados.
“La alerta sanitaria como instrumento, lo que implica sobre todo es que permite un estado de excepción que le entrega a la autoridad sanitaria facultades extraordinarias”, sostuvo, recordando que durante la pandemia permitió que como autoridad sanitaria se pudiese mandatar que las personas utilizaran mascarillas, que hubiesen aforos máximos en lugares cerrados y otras medidas.
En algunos casos, explicó Albagli, la alerta sanitaria también trae consigo recursos financieros para poder pagar actividades que se enmarcan en la respuesta al riesgo sanitario al que se tiene enfrente, “pero no necesariamente, entonces no es inmediato que el hecho de que porque existe una alerta sanitaria, de manera directa e ineludible, van a haber recursos adicionales”.
“Si bien compartimos el diagnóstico de que tenemos que seguir avanzando para poder atender a todas las personas que hoy día tienen un diagnóstico y requieren de tratamiento de cáncer, la alerta sanitaria no es una respuesta, que uno puede decir, que va a poder resolver directamente la problemática”, concluyó.