La subsecretaria de Salud Pública, Andrea Albagli, se refirió la mañana de este jueves al levantamiento de la alerta sanitaria, que rige en el país desde el 8 de febrero de 2020, y que fue decretada en esa fecha debido a la amenaza de un nuevo brote del covid-19.
El fin de la medida, que lleva vigente tres años y medio, está proyectado para el próximo jueves 31 de agosto, la cual fue renovada en marzo no solo por el coronavirus, sino también por la gripe aviar y el aumento de las enfermedades respiratorias, lo que permite a padres y madres poder hacer trabajo telemático.
Al ser consultada por el término de la alerta, Albagi recalcó primero que “por la responsabilidad del Ministerio de Salud, siempre hay que mantener las alternativas abiertas. No podemos descartar ninguna alternativa porque la naturaleza de nuestro trabajo implica alta incertidumbre”.
“Dicho esto, el escenario actual indica que, con toda probabilidad, se va a terminar la alerta sanitaria y no habría una renovación. Tendría que pasar algo muy inesperado para que esto se extienda”, señaló en entrevista con Radio ADN.
Y luego confirmó que “todo apunta a que el 31 de agosto finalizará la alerta sanitaria”.
La autoridad recordó que con el fin de la medida sanitaria “las mascarillas dejarán de ser una obligación”. aunque enfatizó que “seguiremos recomendando su uso”.
Albagli también abordó algunos de los efectos del levantamiento, como la desvinculación de cerca de 15 mil personas en el área de la salud,
“La desescalada empezó el año anterior, y a medida que la emergencia ha ido bajando, el refuerzo de profesionales también ha ido desescalando”, comentó
“Estamos trabajando en una planificación para el futuro, que responde a que el grado de emergencia que justificó la contratación de estas personas, hoy es distinto, porque estamos en una mejor situación epidemiológica”, finalizó.
Efectos del sistema frontal
La subsecretaria de Salud Pública también se refirió a los efectos del sistema frontal que azota a la zona centro-sur del país desde el fin de semana, y que ha provocado graves inundaciones, principalmente entre las regiones de O’Higgins y Biobío.
Albagli dijo que “a la fecha, tenemos 19 establecimientos de salud que no están operativos por diferentes motivos”.
“Hay 15 establecimientos que no están operativos en la región del Maule, y el resto está en O’Higgins”, detalló.
“Algunos están aislados por los caminos, y otros tienen algún grado de daños en su infraestructura”, comentó la autoridad.
Respecto a un posible aumento de las enfermedades respiratorias, explicó que “lo que ocurre con la emergencia es que muchas personas están albergadas, por lo que aumenta la aglomeración, aumentando a su vez el riesgo de contagio”.